Los primeros mexicanos que fueron evacuados de Ucrania tras la incursión rusa cruzaron ayer la frontera y arribaron a Rumania, desde donde serán repatriados a México en un avión de la Fuerza Aérea Mexicana, enviado por instrucciones del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Lo anterior fue informado ayer por el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, quien agregó que la embajadora de México en Ucrania, Olga García, le reportó que hubo una explosión en el edificio contiguo a la legación mexicana en Kiev, por lo que la atención a los mexicanos en ese país se está ofreciendo en una sede alterna.

En un informe que Ebrard entregó al Senado esta semana, se indica que la cancillería ha tenido contacto permanente con 100 mexicanos y sus familias (que suman más de 200 personas) y que desde el 16 de febrero la embajada desalojó a los connacionales que deseaban salir de Kiev y los trasladó a la ciudad de Ivano-Frankivsk, que se ubica al suroeste de Ucrania y es un cercana a puntos fronterizos de países limítrofes, como Polonia, Hungría y Rumania.

El grupo de evacuados está conformado por 22 mexicanos que fueron trasladados en un autobús desde territorio ucranio a suelo rumano en una operación coordinada por las embajadas de México en esos países, con el apoyo del gobierno de Rumania.

Las personas que salieron de Ucrania llegaron a la ciudad rumana de Siret, donde fueron recibidos por Guillermo Ordorica, embajador de México en ese país.

Ebrard compartió un video en el que se observa al primer grupo de connacionales con el embajador Ordorica, quien señaló que está en espera del arribo de más mexicanos provenientes de Ucrania.

El embajador de Rumania en México, Marius Lazurca, expresó que su gobierno está apoyando la evacuación de ciudadanos mexicanos de territorio ucranio.

“¡Los mexicanos siempre serán bienvenidos a Rumania! El gobierno rumano está trabajando para recibir a personas de todas las nacionalidades que huyen de esta guerra injusta e inmoral”, aseguró en las redes sociales.

Sobre la explosión en un inmueble cercano a la sede diplomática mexicana en Kiev, Ebrard no dio detalles, pero explicó que a la embajadora no le fue permitido el paso a la legación, por lo que siguió despachando desde el sótano de la residencia oficial.

“Le reconozco su valor extraordinario para seguir apoyando a los mexicanos en Ucrania”, agregó el canciller.

En tanto, Guillermo Padilla, mexicano en Ucrania, denunció en redes sociales que no ha recibido ayuda de la embajada mexicana para salir del país. El jefe de la oficina del canciller, Daniel Millán, informó también en Internet que por instrucciones de Ebrard habló con Padilla y le informó que la delegación mexicana está al pendiente de él y de todos los mexicanos en Ucrania.

Agregó que “ante las restricciones de movilidad por las hostilidades, buscamos soluciones para poder evacuar a nuestros connacionales”.