Ante la situación en Ucrania, el gobierno de México tiene un plan para evitar impactos negativos en las tarifas de los energéticos, informó el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Después de ratificar la posición de nuestro país “en contra de las invasiones y de las guerras”, señaló:
“Estamos preparados para eso, con el propósito de que no haya apagones, que no falte la luz y que no aumente el precio”, lo mismo en el caso de las gasolinas de importación.
En conferencia de prensa, el mandatario se refirió a la vigencia de la política exterior consagrada en el artículo 89 de la Constitución, relativa a privilegiar la no intervención, la autodeterminación de los pueblos y la solución pacífica de las controversias.
No obstante, admitió que el conflicto Rusia-Ucrania ya tiene efectos económicos en el planeta, por lo que su gobierno se ha preparado desde hace tiempo, en especial para utilizar otros elementos en caso del encarecimiento o escasez de gas para generar electricidad.
En ese sentido se incrementaría a su máxima capacidad la producción en las hidroeléctricas, al tiempo de preservar los subsidios a combustibles, como la gasolina, y tomar precauciones si se incrementa el precio de la gasolina de importación o el del petróleo crudo.
“Que esto no se traslade a los consumidores, que mantengamos el precio de las gasolinas como está acordado, que no aumente el precio por encima de la inflación. Entonces, estamos preparados con ese propósito. Y vamos a estar pendientes”, señaló.
Por otro lado, indicó, la “intranquilidad y nerviosismo” en los mercados toma a México con el peso en una situación favorable, con un tipo de cambio –el miércoles de esta semana– de 20.29 pesos por cada dólar, hecho histórico, aun frente a las variaciones.
“Ahora puede estar subiendo por esta situación, pero tenemos margen. Y esperemos que pronto se normalice la situación en Ucrania, que haya diálogo y se resuelva esto, ¿no?”
Además – subrayó– no queremos la guerra en ningún lado, en ninguna parte, no queremos que la gente sufra, no queremos que la población civil sea afectada, no queremos la confrontación bélica, esa es nuestra postura.
En términos de política exterior “nos vamos a seguir conduciendo, promoviendo que haya diálogo, que no se utilice la fuerza, que no haya invasión, no estamos a favor de ninguna guerra.
“México es un país que siempre se ha pronunciado por la paz y por la solución de las controversias” por la vía pacífica.