Puebla, Pue., La familia Jenkins recuperó ayer las instalaciones de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP), después de que en junio de 2021 fue destituida de la directiva de la casa de estudios e inició un litigio –aún en curso– para recuperar el control.
A la reapertura del campus acudieron unas 400 personas (alumnos, docentes y personal administrativo), quienes gritaron consignas en contra del gobierno del estado, al que acusaron de intentar “apropiarse” de la Udlap.
Alrededor de las 8:30 de la mañana, el grupo dirigido por Cecilia Anaya Berríos, a quien los Jenkins nombraron rectora interina, ingresó al campus en medio de vítores de los estudiantes, que gritaban “Udlap libre!” y “¡sí se pudo, sí se pudo!”
Por bloques, los alumnos entraron y encontraron jardines con el pasto crecido y seco, salones abandonados, áreas al aire libre empolvadas y estructuras oxidadas para sujetar bicicletas.
En junio del año pasado, la Junta para el Cuidado de las Instituciones de Asistencia Privada (JCIAP), organismo descentralizado del gobierno del estado, destituyó a los miembros de la familia Jenkins del Patronato de la Fundación de la UDLAP (FUDLAP).
Los Jenkins enfrentan órdenes de aprehensión de la Fiscalía General de la República por el delito de lavado de dinero, a raíz de una denuncia que Guillermo Jenkins, nieto primogénito de la familia, presentó en 2013 en contra de sus parientes, a quienes acusa de saquear 720 millones de dólares del patrimonio de la Fundación Mary Street Jenkins, que dio origen a la UDLAP.
Tras su destitución, los Jenkins iniciaron un litigio. Primero les fue devuelto el control administrativo y de las cuentas bancarias y, tras varios fallos judiciales, el jueves recuperaron las instalaciones, pero el conflicto aún no se resuelve de fondo.
El lunes reanudan clases
Los estudiantes señalaron que la devolución de las instalaciones a la familia Jenkins fue resultado de una lucha de la comunidad estudiantil que se opuso al patronato que la JCIAP nombró en sustitución de los primeros.
Cecilia Anaya anunció que el lunes se iniciarán las clases híbridas, excepto en laboratorios. Añadió que la entrega del campus por el patronato nombrado por la JCIAP, en el juzgado segundo de San Andrés Cholula, fue un “proceso terso”.