Luego de ser invitado como aspirante del partido Movimiento Ciudadano (MC) a la gubernatura de Quintana Roo, el senador por Morena José Luis Pech presentó de manera oficial su renuncia al partido guinda.
Sin hacer mención a su próxima candidatura por otra fuerza política, reprochó en un oficio enviado al dirigente nacional de Morena, Mario Delgado, que lo hace “porque no estoy de acuerdo en que el Partido Verde se haya adueñado de las decisiones que competen a la militancia de Morena y a la ciudadanía quintanarroense”, por lo que solicitó la cancelación de su militancia en esa agrupación.
La semana pasada, al publicar un video en el que advierte que no respaldará a Mara Lezama, la candidata de la alianza Morena-PVEM, Pech denunció que se ha dado todo a “la mafia verde”, la que tendrá los municipios turísticos de esa entidad.
Tras eso, el dirigente estatal de Morena en Quintana Roo, Humberto Aldana, lo invitó a renunciar a su militancia. Dos días después, MC lo invitó a ser candidato en sustitución del polémico empresario y actor Roberto Palazuelos.
Por separado, el también senador de Morena José Ramón Enríquez, quien buscó sin obtenerla la candidatura de su partido en Durango, se separó de sus funciones en el órgano legislativo para intentar nuevamente ser abanderado. Él llegó al escaño por las siglas de MC, pero cambió de partido.
Al preguntársele sobre denuncias interpuestas por Enríquez en contra del proceso interno, Delgado defendió el método al indicar que “hay muchos aspirantes siempre y desafortunadamente sólo hay espacio para un solo candidato, una candidata. Tenemos el compromiso también nosotros de abrir espacios de participación para las mujeres. Para nosotros fue una decisión de diciembre pasado y cada quién tiene su derecho de recurrir a los tribunales”.
El dirigente reafirmó que las candidaturas ya definidas por Morena, son “prácticamente imposibles” de cambiar.