Tijuana, BC. La instalación de campamentos militares del Ejército y Guardia Nacional en el muro fronterizo entre Tijuana y San Diego ha desarticulado ‘chozas de seguridad’ construidas por grupos criminales de carteles de drogas dedicados al tráfico de personas.
La carpa militar instalada en el muro fronterizo de Playas de Tijuana a la altura de Cañada del Matadero, obligó a “polleros” a retirarse del lugar, donde operaban con una sofisticada base clandestina para el tráfico de personas hacia Estados Unidos.
María, cuyo nombre es ficticio, vive desde hace un año en Cañada del Matadero, señala que con la presencia militar la choza construida por polleros fue abandonada, el lugar era utilizado para esconder a migrantes que cruzarían de manera ilegal a Estados Unidos.
“Ya tienen como 4 meses (los militares), pero están de día y noche (…) no se meten con uno para nada, al principio si nos revisaban las casitas porque pensaban que estaban ayudando al señor (el pollero), pero nosotros no tenemos nada que ver con eso”.
El área del Cañada de Matadero estaba detectada como una ruta de tráfico de personas, pues la choza había sido revisada por fuerzas policiales.
“El señor (pollero) ya se había ido porque seguido caían la placa aquí, llegaron los militares y ya hasta lo habían golpeado”.
A un lado de la carpa militar instalada hace 4 meses a un lado del muro fronterizo de Playas de Tijuana, está la ‘choza de seguridad’ que fue utilizada por los traficantes de personas, misma que ahora está siendo habitada por María, como su hogar.
“Apenas tengo un mes y medio. A mí me prestaron (la choza) los de gobernación o migración porque era la única de aquí que no tenía casita bien” dijo María.
Es una choza de seguridad que no se alcanza a ver a simple vista, está construida a base de cemento, operaba anteriormente con una planta de luz, un baño con fosa séptica, la ventana y puerta están protegidas con rejas de hierro, tiene tres espacios o habitaciones.
Está edificada en un área estratégica con vista hacia Estados Unidos y al cañón pluvial por dónde ingresan los migrantes al país norteamericano.
La casa era utilizada para esconder a los migrantes mientras esperaban el mejor momento para cruzarlos de manera ilegal y por el que cobran hasta 9 mil dólares por persona.
El antropólogo Víctor Clark Alfaro señaló que este tipo de chozas están construidas a lo largo de la línea fronteriza, principalmente en lugares que son utilizados por polleros para cruzar personas hacia Estados Unidos donde no hay muro fronterizo; agregó que las ‘chozas de seguridad’ proliferan principalmente en el área de Nido de las Águilas de Tijuana, son construidas por polleros que trabajan para carteles de drogas.
Dijo que la presencia militar no es una práctica nueva en la entidad, sin embargo, se está visibilizando la presencia militar en lugares más visibles en su intento por desarticular las ‘chozas de seguridad’ utilizadas por polleros.
Clark Alfaro dijo que existen dos tipos de ‘polleros’; los que trabajan de manera local o como negocios familiares y los ‘polleros’ que trabajan para el cártel de Sinaloa, mismos que construyen las ‘chozas de seguridad’ a lo largo de la frontera entre Tijuana y San Diego.