Hace 10 años se fundó en Mérida, Yucatán, el Centro de Estudios Mayas Yuri Knórosov (Cemyk) para ahondar y continuar las investigaciones acerca de la vasta obra del lingüista ruso, de quien este 2022 se celebra el centenario de su natalicio.
Desafortunadamente, en México y en América Latina “es muy poco lo que se ha publicado y lo que se sabe del gran legado de Knórosov; sólo se le conoce por el desciframiento que hizo de la escritura maya, pero su trabajo abarca una serie de temas que incluyen cuestiones asiáticas; sus estudios mayas se refieren también a la teoría, a partir de donde desarrolló la parte epigráfica. Es toda una vida de investigaciones”, explicó el codirector del Cemyk, Adrián Maldonado.
En entrevista con La Jornada, el académico detalló que los recientes años han tratado de difundir los otros grandes aportes del epigrafista, en especialidades como las filosofía antropológica o arqueología.
De la mano de Galina Ershova, directora del centro, discípula y biógrafa de Knórosov, se han conformado equipos de trabajo en la península de Yucatán y en Guatemala para trabajar proyectos de antropología, historia y arqueología, principalmente.
Debido a la pandemia de covid-19, las actividades de investigación, docencia y difusión se han realizado durante 2020 y 2021 de manera virtual.
“No hemos dejado de estar activos, pero en cuestión de presupuesto nos afectaron terriblemente las medidas de confinamiento; por ejemplo, teníamos previstas entre cinco o 10 publicaciones y quedaron reducidas a tres. La economía covid nos está restringiendo.
“El centro se financia gracias a convenios con la Universidad Estatal de Humanidades de Moscú, y nos apoyaba el gobierno del Estado a través de Cultur, pero se redujeron los fondos por la pandemia. Ahorita el trabajo es independiente y los recursos son de los investigadores rusos. El centro funciona gracias a un esfuerzo binacional.”
Aportes a la ciencia
Maldonado recalcó que para entender a la figura Knórosov hay que pensar que además de su aportación científica, “su legado construyó un puente, pues nos permitió entrar en contacto, de manera más directa, con académicos de otros países, también en otras cuestiones de ciencia y tecnología.
“No hay nada de extraño en la pasión que los investigadores rusos sienten por la cultura maya si pensamos en el nivel científico y artístico que tiene ese país. Por eso, tampoco es ninguna casualidad que Knórosov haya destacado en su área; él viene de una cultura universal.”
Para celebrar el centenario del nacimiento del lingüista y los 70 años del desciframiento, el Cemyk de Yucatán prepara un programa de conferencias, exposiciones, “e incluso un congreso de mayistas, en el escenario ideal, aunque todo depende del curso de la pandemia”, confirmó Maldonado.
La información de las actividades se difundirá en cuanto se concrete, en la página de Facebook del centro: https://www.facebook.com/KnorosovMeridaMX/