En la construcción del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), la Auditoría Superior de la Federación (ASF) encontró que en 2020, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) no reportó egresos por 20 mil 243.1 millones de pesos del Fideicomiso Público de Administración y Pago de Administración de Equipo Militar. Tampoco acreditó que los materiales donados provenientes del proyecto de Texcoco hayan sido registrados contablemente a costo cero. Se trata de bienes por 6 mil 12 millones de pesos.
Aunado a ello, no se demostró el uso y destino de mil 870.3 toneladas de acero consideradas como desperdicios procedentes del extinto proyecto, que fueron donadas por el Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM) y se encuentran en los almacenes de los proveedores encargados de su transformación.
Al presentar los resultados de la fiscalización a la cuenta pública de la Federación de 2020, la ASF constató que en los reportes de supervisión de la Sedena de ese año, se registró un avance general en el proyecto de 46.5 por ciento en los 24 frentes de obra activos.
También se determinó que esta dependencia se coordinó con la entonces Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), 36 entidades, gobiernos estatales y municipales, organizaciones no gubernamentales y empresas privadas para tratar los temas de la interconexión terrestre y el rediseño del espacio aéreo.
Sobre este último punto, la ASF expuso que la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC), Servicios a la Navegación del Espacio Aéreo Mexicano (Seneam) y el Comité Técnico de Espacios Aéreos trabajaron conjuntamente para definir las nuevas rutas de llegada, aproximación y salidas con base en la Navegación Basada en el Desempeño (PBN, por sus siglas en inglés), para las terminales de la Ciudad de México, Toluca, Puebla y Cuernavaca. Los controladores aéreos iniciaron con el uso de la PBN en esas terminales.
En materia de interconexión terrestre, la SICT y la Sedena informaron que en 2020 se contaba con 13 proyectos viales y 10 de transporte en desarrollo para conectar al AIFA.
La ASF difundió que realizó nueve auditorías de inversiones físicas con una muestra de 17 mil 6 millones de pesos de los 18 mil 444.9 millones correspondientes a la totalidad de los recursos federales reportados como ejercidos en 17 frentes de obra.
Entre las observaciones explicó que en el frente 2 se realizaron pagos sin comprobación documental registrada, en el frente 17 sólo se ejecutaron 14 de los 17 prepuentes establecidos en el plan maestro, y en la Torre de Control se adjudicaron contratos a costos mayores respecto a los mismos trabajos adjudicados en la terminal de pasajeros.
En los almacenes de los frentes 5 y 14 y en los talleres de los proveedores del frente 7 existe material sobrante y de desperdicio donado por el GACM sin que a la fecha se acredite su uso y destino.
Mientras en los frentes 10, 14 y 20 no se elaboraron la totalidad de las estimaciones para acreditar los avances físicos reportados por la entidad fiscalizada a diciembre de 2020.