Jerusalén. El primer ministro israelí, Naftali Bennett, dijo el domingo que un acuerdo sobre el programa nuclear de Irán es "inminente" y advirtió que sería "frágil" en comparación con el anterior, alcanzado en 2015.
Las negociaciones sobre el programa nuclear iraní se reanudaron en noviembre en Viena (Austria) tras una larga pausa.
El objetivo es que Estados Unidos vuelva a participar en el acuerdo de 2015 que debía impedir que Teherán se hiciera con una bomba atómica, algo que la República Islámica siempre negó.
Estados Unidos abandonó el acuerdo en 2018 bajo el mandato del presidente Donald Trump, restableciendo sus sanciones. Como respuesta, Irán empezó a incumplir gran parte de las restricciones que había acordado imponer a sus actividades nucleares.
Israel, aliado de Estados Unidos y enemigo declarado de Irán, considera que Teherán y su programa nuclear son una amenaza para su seguridad y la de Medio Oriente.
Por ello se opuso al acuerdo de 2015 porque, según Israel, el levantamiento de las sanciones contra la República Islámica previsto en el texto le permitía armarse todavía más.
"Un nuevo acuerdo podría ser inminente (…) Sería más frágil que el anterior", dijo Bennett antes de la reunión semanal del gobierno en Jerusalén.
Israel se está preparando "para el día después [del acuerdo] a todos los niveles", añadió.
"El terrorismo iraní nos pone en peligro a nosotros y a otros países de la región (…) El Estado de Israel se está preparando para el día después [de la conclusión del acuerdo] para garantizar la seguridad de sus ciudadanos con nuestros propios medios", añadió.
El Primer Ministro israelí retomó el tema el domingo por la noche durante una intervención en una conferencia de organizaciones judías estadounidenses.
"El principal problema de este [nuevo] acuerdo es que en dos años y medio (…) Irán podrá desarrollar, instalar y poner en marcha centrifugadoras nucleares", denunció en un discurso.