El presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que “falta más trabajo” en el combate a la inseguridad, porque hay inercias y vicios del pasado, pero no sólo es un asunto de las fuerzas policiales o armadas, sino de los presuntos actos de corrupción en el Poder Judicial.
Previamente, el general secretario Luis Cresencio Sandoval había presentado un informe en el que se incluyeron los resultados en las nueve entidades con municipios de atención prioritaria (clasificados así por su nivel de violencia); a 189 días de iniciada esa estrategia, la entidad con el mayor incremento de homicidios es Zacatecas, con 10 por ciento más; le sigue Michoacán, con 9 por ciento, y estado de México, con 5 por ciento adicional. Con registros a la baja están Quintana Roo, Baja California, Jalisco, Guanajuato y Sonora.
En cuanto a las aduanas, cuya revisión es uno de los principales objetivos de su gira de esta semana por entidades fronterizas, López Obrador confirmó que “ya todas” son administradas por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Adelantó que se dará por concluido el contrato de tecnología para vigilancia de las aduanas, actualmente a cargo de una empresa privada, para dar paso a una supervisión con equipos y operadores gubernamentales, y de esta forma seguir atajando la corrupción en estos puntos de ingreso de mercancías.
En la conferencia de prensa matutina que este viernes se realizó en Ciudad Juárez, Chihuahua, el mandatario dijo que ya hay indicios de eficacia de la estrategia aplicada en este sector.
“El año pasado se recaudaron alrededor de un billón de pesos, creció como 200 mil millones de pesos. Es que la corrupción hay que combatirla no sólo por razones de índole moral, sino porque es mucho, mucho lo que se fuga, lo que se va por el caño de la corrupción”, advirtió.
Está demostrado, agregó, que en países como los nórdicos no hay corrupción y, por tanto, no hay pobreza ni violencia. En cambio, en México ese es el principal problema y de ahí se derivan otros como la violencia.
Cuando hablaba de la participación de la Sedena en aduanas resaltó el valor de los especialistas de la institución castrense encargados de distintas obras públicas, como la construcción del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles –cuya inauguración está programada para el 21 de marzo– o la construcción de sucursales del Banco del Bienestar y de los cuarteles para los integrantes de la Guardia Nacional.
“Estamos haciendo uno de los mejores aeropuertos del mundo, sin corrupción. Sólo hay tres en el mundo con pistas de calidad, de concreto, de 4 mil 500 metros. Y cuando se inaugure y lo vea la gente, se va a sentir muy orgullosa”, expresó.
En cuanto a los resultados en materia de inseguridad y violencia, el Presidente subrayó que hay avances, pero falta más trabajo, frente a las inercias y vicios que resultan en favor de la impunidad, en particular cuando no se tiene definida la línea entre autoridad del más alto nivel y delincuencia, como ocurrió en sexenios anteriores, y permeaba a los niveles estatal y municipal.
Sin embargo, dejó en claro que no todo depende del Poder Ejecutivo, sino también del Judicial.
Puso de ejemplo que en días recientes se detuvo en Chihuahua a un criminal buscado por las autoridades de Zacatecas, pero al devolverlo a esa entidad fue dejado en libertad por la resolución de un juez durante la madrugada.
En ese punto, dijo que los gobiernos estatales y el federal no tienen “permiso” de pelearse cuando de trabajo conjunto de seguridad se trata. Incluso, en algún momento bromeó con la lesión sufrida por la gobernadora María Eugenia Campos, del PAN. “Me da gusto que está malita de la mano derecha y está bien de la izquierda”.
(Con información de Rubén Villalpando, corresponsal)