La Fiscalía General de la República (FGR) imputó al presidente del Tribunal Universitario de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y decano de la Facultad de Derecho, Eduardo López Betancourt, por la presunta comisión de los delitos de hostigamiento sexual agravado y tratos crueles e inhumanos y degradantes.
El juez Gustavo Aquiles Villaseñor fijó la continuación de la audiencia inicial para el próximo miércoles a las 9 de la mañana, en la que decidirá si vincula a proceso al jurista universitario que fue señalado de cometer actos de hostigamiento sexual y tratos crueles y degradantes en contra de una estudiante de posgrado en derecho.
El caso, según las constancias presentadas por la Fiscalía Especial para los Delitos de Violencia contra las Mujeres y Trata de Personas, comenzó en octubre de 2019, cuando el docente, al encontrarse con la entonces estudiante de derecho, le dijo una frase de hostigamiento sexual seguida de “pinches viejas por eso las matan”.
López Betancourt y su defensa solicitaron el plazo constitucional de 144 horas para que se resuelva si le dictan o no la vinculación a proceso, luego de que la representación de la FGR señaló agresiones verbales de carácter sexual, presuntamente ocurridas de 2019 hasta 2020.
Asimismo, se señaló que ante las quejas y denuncias que puso la estudiante en contra del docente, y que hizo señalamientos públicos en su contra, éste pretendió que la juzgaran por daño moral y le exigió una reparación del daño con el pago de un millón de pesos, aunque un juzgado del fuero común rechazó la imputación.
Al salir de la audiencia, la víctima, María de Lourdes, señaló que confía en las autoridades y que se dicte vinculación a proceso contra el académico, además de que sea un parteaguas para que se detengan todos los casos de hostigamiento que “nos han dañado tanto a las mujeres de la universidad, en los niveles que sea.
“Que se ponga un alto al acoso y la violencia sexual al que estamos expuestas las mujeres. En mi caso llevo años luchando contra un hombre muy poderoso, el presidente del Tribunal Universitario, que incluso ha tratado que me expulsen de la universidad.”
Entre las cosas que ha considerado la FGR en cuanto a reparación del daño está el pago de 150 mil pesos que ha costado su tratamiento sicológico, que cubra las demás consultas para concluir sus atenciones médicas y que no se acerque de nuevo a la estudiante.
Precisamente el juez impuso como medida cautelar que el docente de la UNAM no se pueda acercar ni llamar a la víctima ni a quienes se presentaran como testigos de lo sucedido.