Ciudad de México. Para conmemorar el Día del Inventor Mexicano, la Fundación México-Estados Unidos para la Ciencia (Fumec) y Tekugo, una consultora especializada en propiedad intelectual, organizaron un festejo con la participación de jóvenes inventores, académicos y expertos en registro de patentes.
En el evento a distancia se subrayó la necesidad de promover y apoyar el talento mexicano, de jóvenes como Itzel Ruiz, quien a los 17 años de edad presentó su primer invento, bajo la premisa de que “es parte de nosotros ver un problema y no esperar a que alguien más lo solucione”.
El encuentro permitió a los jóvenes participantes subrayar la importancia de cumplir con el compromiso social de dar soluciones a problemas que se enfrentan diariamente y ser más empáticos.
En la Pasarela de Proyectos de Jóvenes Mexicanos, César Rojo, coordinador de Propiedad Intelectual Fumec-Propatenta, dijo que hay inventos que nacen por accidente, para una tarea escolar por ejemplo, pero que después tienen que desarrollarse bajo la idea de “creo, invento, protejo y vendo”.
En el espacio titulado Las universidades precursoras de la creatividad participó la catedrática Laura Adame, quien destacó que los jóvenes deben ser educados para enfrentar responsabilidades reales, haciendo referencia que en muchas escuelas suelen pedirles proyectos ficticios.
La académica resaltó la importancia te poder pedirles proyectos que culminen de manera real, respetando los lineamientos correctos y no hipotéticos, pues en algunas escuelas se pide a los estudiantes crear empresas ficticias. En cambio, lo que debería hacerse es presentar problemas reales que generen soluciones reales en beneficio de la sociedad.
Arturo Broca, director de Tekugo, destacó que el registro de patentes en México ha crecido de 14 mil proyectos presentados para su trámite en 2020, a 16 mil el año pasado.
Según datos de Organización Mundial de Propiedad Intelectual (OMPI), sólo cuatro por ciento de las patentes que se registran en el país se concede a mexicanos, lo que revela la inexistencia de una cultura de registro de innovaciones.