Al menos seis horas de balaceras vivieron los habitantes de Caborca, Sonora, entre la noche del martes y la madrugada del miércoles, por los enfrentamientos que presuntos miembros de las organizaciones criminales La Plaza y Los Durango sostuvieron en diferentes puntos del municipio por el control de tráfico de drogas en la frontera con Arizona.

La Fiscalía General de Justicia del estado (FGJE) informó que durante los tiroteos se reportó la desaparición forzada de dos jóvenes; el alcalde Abraham Mier Nogales aseguró que hubo “varios muertos”, aunque no dio detalles y llamó a los habitantes a quedarse en casa a partir de las ocho de la noche y solicitó que el cierre de negocios sea a las 10.

En redes sociales, ciudadanos expresaron miedo y preocupación; relataron que entre las 20 horas y dos de la madrugada por las calles desfilaron camionetas con sujetos que portaban armas de grueso calibre, denunciaron secuestros y uno de los usuarios señaló que había un muerto fuera de su departamento.

“Personal de la fiscalía de Sonora, con integrantes de la mesa estatal de seguridad, la policía estatal, la Secretaría de la Defensa Nacional, la Guardia Nacional, la Secretaría de Marina y la Fiscalía General de la República realizan la búsqueda de dos jóvenes: Sebastián y Eduardo, quienes fueron privados de la libertad esta madrugada en Caborca. Situación que podría derivarse de una confusión”, publicó en Twitter la FGJE.

Sebastián, de 23 años, es hijo del locutor local Marco Antonio Manríquez, quien solicitó al presidente Andrés Manuel López Obrador su ayuda para encontrar sanos y salvos tanto a su familiar como al amigo de éste.

En entrevista, Manríquez explicó que la última vez que supo de su hijo fue cuando éste llamó a su mamá para avisar que debido al fuego cruzado en la calle se quedaría en casa de su compañero; sin embargo, a las tres de la madrugada de este miércoles, un comando irrumpió en el domicilio y se los llevó.

María Dolores del Río Sánchez, secretaria estatal de Seguridad Pública, afirmó sin dar detalles que se incrementó la presencia policial en el norte de la entidad y dijo que en varias operaciones se decomisaron armas y municiones y se arrestó a “varias personas” que fueron remitidas al Ministerio Público Federal.

En Jalisco, un policía muerto y otro lesionado de gravedad fue el saldo de un ataque armado contra agentes estatales en la cabecera municipal de Cañadas de Obregón, en la región Altos Sur.

Según los reportes policiales, varios individuos a bordo de tres unidades dispararon a los uniformados cuando se encontraban en los arcos de entrada de la localidad; luego huyeron rumbo a la capital del estado.

Uno de los oficiales, identificado como Miguel Ángel Sánchez Velázquez, falleció cuando recibía atención en un hospital de Tepatitlán y el herido fue trasladado al área metropolitana de Guadalajara en un helicóptero que envió la policía de Zapopan.

En Zacatecas, un niño de 10 años y su hermana de 17 perecieron a causa de balas perdidas cuando viajaban con su familia a bordo de una camioneta, por la colonia El Olivar, en la ciudad de Fresnillo.

Los decesos ocurrieron cuando varios hombres dispararon en múltiples ocasiones contra un individuo que pasaba caminando junto al automotor en que los menores iban.

Siete homicidios más fueron reportados por las autoridades en la entidad: dos en los municipios de Fresnillo, Zacatecas y Morelos, respectivamente, y uno en Jerez.

La Universidad de Guadalajara y la Universidad Autónoma de Zacatecas emitieron por separado extrañamientos a las autoridades del estado por el homicidio, el pasado fin de semana, de tres estudiantes de la Universidad Tecnológica y una maestra recién egresada de la normal Manuel Ávila Camacho.

En Aguascalientes un individuo fue ultimado a balazos la noche del martes en la colonia Los Arellano de la capital del estado y la mañana de ayer fueron hallados dos cuerpos en un predio rústico ubicado junto a la carretera federal 70 oriente, frente a la comunidad de Norias de Paso Hondo.

En Colima, 54 personas fueron detenidas durante una operación policial en contra de grupos delincuenciales que presuntamente han participado en tiroteos desde el pasado 10 de febrero en la capital y su zona conurbada, dio a conocer ayer el secretario estatal de Seguridad Pública, Manuel Llerandi Ruiz.

La gobernadora Indira Vizcaíno indicó que para reforzar la seguridad en el estado llegaron 615 integrantes de las secretarías de la Marina y la Defensa Nacional, así como de la Guardia Nacional.