Toluca, Méx. Veinte meses antes de que concluya el periodo para el cual fue nombrado, este miércoles Alejandro Gómez Sánchez presentó su renuncia como fiscal general de Justicia del Estado de México, tras ocho años de estar al frente de esta institución, primero como procuraduría y a partir de 2017 ya como fiscalía y con el reconocimiento legal de ser un órgano autónomo.
Alejandro Gómez Sánchez aseguró que se va con resultados positivos pues a lo largo de su gestión, dijo, se fortalecieron las capacidades institucionales tanto en el ámbito operativo como en materia procesal.
Indicó que la persona que llegue al frente de la Fiscalía tras un procedimiento de selección en el que participará la legislatura del estado y el gobernador, encontrará una institución fuerte y sólida, pero también con grandes retos.
Alejandro Gómez fue designado procurador de justicia en mayo de 2014 por el entonces gobernador Eruviel Ávila Villegas, y en 2017, todavía con Eruviel como gobernador, la Legislatura lo designó como el primer fiscal general de Justicia con la transformación legal de esta institución de dependencia del gobierno estatal a órgano autónomo.
El ahora ex fiscal dijo que el cargo que desempeñó por los últimos ocho años implicó un desgaste personal, físico y emocional; por ello, “a partir de una reflexión personal, así como con mi familia y colaboradores, tengo la certeza de que es momento de cerrar este ciclo”, dijo, en un mensaje a medios previo a la presentación del documento de su renuncia ante la Legislatura del Estado de México.
Con la renuncia del fiscal, ahora la Legislatura deberá iniciar un proceso de selección de un nuevo titular de la FGJEM, que no debe llevar más de 20 días. Primero deberá emitir una convocatoria y de los registrados al cargo elaborará una lista de 10 perfiles idóneos, que será turnada al gobernador Alfredo del Mazo y éste deberá elegir de entre ellos a una terna que remitirá al Congreso, quien finalmente designará al nuevo fiscal con mayoría calificada.