Puebla, Pue. Elementos de la Guardia Nacional (GN) y granaderos de la policía estatal desalojaron la madrugada de este martes a los pobladores que desde el 22 de marzo de 2021 ocupaban la planta embotelladora de la firma francesa Bonafont, ubicada en la comunidad de Santa María Zacatepec, municipio de Juan C. Bonilla, a 20 kilómetros de la capital poblana, a la que culpan de la escasez de agua en la región por extraer más de un millón de metros cúbicos del líquido en exceso de lo que tiene permitido.
Por la tarde, los 20 pueblos nahuas de las regiones cholulteca y de los volcanes Iztaccíhuatl y Popocatépetl dieron una conferencia de prensa virtual en la cual responsabilizaron al presidente Andrés Manuel López Obrador, al gobernador de Puebla, Luis Miguel Barbosa Huerta, y al presidente municipal de Juan C. Bonilla, José Cinto Bernal, de coordinarse para defender a Bonafont, que desde hace 30 años sobrexplota el agua en la zona de los volcanes.
Barbosa Huerta, de Morena, se deslindó de la operación. Explicó que la fuerza pública acató una orden del Poder Judicial de la Federación e hizo un llamado a la compañía y a los pueblos a dialogar.
Un vocero de los opositores explicó: “Entraron por la fuerza a las instalaciones, desmontaron el cantón que llevaba instalado desde marzo de 2021, cuando se cerró la embotelladora por decisión de asamblea de los pueblos de la región para frenar el saqueo de agua. Ignoraron y violentaron nuestra autodeterminación”.
Desmantelan la Casa de los Pueblos y borran murales
Los uniformados, agregó, borraron los murales que diversos artistas pintaron para apoyar la construcción de la Casa de los Pueblos y que daban identidad al espacio. No hubo detenidos ni lesionados.
Por la mañana, los efectivos entregaron las instalaciones a sus propietarios; personal de la empresa cercó con malla ciclónica la entrada de la planta, desmanteló el campamento de los opositores, subió sus pertenencias a un camión de redilas y se las llevó.
En un comunicado, la agrupación Pueblos Unidos de la Región Cholulteca señaló: “Con desmedida presencia de las fuerzas públicas de los tres niveles de gobierno, una vez más, despojan y reprimen a los pueblos que desde hace casi un año cerramos la planta embotelladora Bonafont, del corporativo Danone”.
En conferencia de prensa, los opositores acusaron a los tres niveles de gobierno de violentar la autodeterminación de las comunidades originarias con la entrada de la fuerza pública a la Casa de los Pueblos, bastión de la organización de Pueblos Unidos de la Región Cholulteca y de las organizaciones que han coordinado la resistencia en defensa del agua en los ámbitos nacional e internacional.
“Son culpables de perpetrar el desastre ambiental que la empresa Bonafont, del corporativo Danone, ha provocado durante casi 30 años en las comunidades aledañas a los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl; ellos, los empresarios y el Estado, creen que secuestrando las instalaciones del Altepelmecalli (Casa de los Pueblos en nahua) nos vencerán, pero no nos vamos a retirar, defenderemos el agua y la vida”, advirtieron los activistas.
Desde Juan C. Bonilla, advirtieron que recuperarán lo que es de los pueblos, “como lo hemos hecho históricamente, y haremos valer la ley de nuestras comunidades. ¡Fuera Bonafont! ¡Fuera Danone! ¡Alto a la represión de los pueblos que defienden la vida!”, exclamaron.
La planta de Bonafont fue ocupada el 22 de marzo de 2021, durante la conmemoración del Día Mundial del Agua, en protesta porque la sobrexplotación ha secado ríos, pozos y ameyales de la región.
En la conferencia de medios que ofrece todas las mañanas, el gobernador llamó a la compañía y a los pueblos a dialogar con la participación de los gobiernos federal y estatal. Manifestó que se debe garantizar el respeto a los derechos humanos y anunció que protegerá el agua de la región.
Anuncian boicoteo global y piden apoyo al EZLN
En meses recientes este conflicto cobró relevancia en América Latina. La protesta contra Bonafont llegó hasta la sede del Grupo Danone en Francia, y colectivos de Europa, Estados Unidos y Canadá se solidarizaron en la lucha por la defensa del agua en Juan C. Bonilla.
En redes sociales, comunidades que apoyan a los pobladores se declararon en asamblea permanente y “alerta máxima” ante la posible reactivación de la embotelladora. “Arrancamos una campaña permanente de movilización, boicoteo y sabotaje contra la empresa Bonafont a escala global”.
Solidaridad de Raúl Zibechi
La organización solicitó la ayuda del Ejército Zapatista de Liberación Nacional, del Congreso Nacional Indígena y del Concejo Indígena de Gobierno para frenar la represión y exigir la devolución de lo que llaman Centro Cultural Altepelmecalli.
En México, dijeron, se está viviendo una escalada de violencia en contra de los pueblos organizados. Sólo en esta semana, recordaron, hubo represión en el Istmo de Tehuantepec y a los normalistas de Ayotzinapa (Guerrero) y Mactumatzá (Chiapas); además, Francisco Vázquez, defensor del agua en Morelos, fue asesinado por oponerse a la termoeléctrica en Huexca.
Arguyeron que esas son muestras de que “estamos viviendo una guerra mundial por el agua en contra de los pueblos y la humanidad”.
El periodista e investigador uruguayo Raúl Zibechi dio a conocer un mensaje en video en el cual externa su solidaridad con los habitantes que ocuparon la planta de Bonafont y llamó a estar atentos al desenlace de estos hechos.
“Desde aquí quiero solidarizarme con los compañeros y compañeras de la Casa de los Pueblos, que hasta hace unas horas estaban ocupando la empresa Bonafont en Puebla y fueron desalojados en un operativo masivo, violento, de la Guardia Nacional y de la policía del estado de Puebla.
“La lucha sigue, la lucha continúa. La Casa de los Pueblos no se puede perder; es un espacio que ha sido muy importante en estos meses, en la resistencia de los pueblos nahuas del valle donde están, ahí en Puebla, y un referente de las resistencias a la megaminería, a los megaproyectos, a los emprendimientos eólicos en todo México, de modo que en todo el mundo debemos redoblar la solidaridad con la Casa de los Pueblos”, insistió el también colaborador de La Jornada.
Con información de Fernando Camacho Servín