Ciudad de México. El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo hoy que tiene un acuerdo con sus hijos en el sentido de que mientras él esté en un cargo, ellos no pueden trabajar en el sector público.
“Mientras yo he sido dirigente ellos no han ocupado un cargo, porque ese es el acuerdo que tenemos.
"Lo sabemos muy bien y les pido que se sigan portando bien, como lo están haciendo y agradezco al creador de que no pintan para ser como el hijo de José María Morelos, del cura Morelos que tuvo un hijo, Juan Nepomuceno Almonte que se volvió traidor y se pasó al bando de los conservadores. Eso es todo y ahí nos vemos”, señaló el mandatario al final de la conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional.
Esta vez la mañanera concluyó de manera inusual. Cuando el mandatario contaba anécdotas de lo que han visto y padecido sus hijos por tener un padre opositor, de plano se le hizo un nudo en la garganta y pausó su exposición por 10 segundos.
“Acerca de lo de mis hijos, yo tengo la ventaja, si se puede decir así, de que hemos sido espiados durante muchos años, dede que ellos estaban pequeñitos.
"Bueno, cuando empezamos a ser oposición en Tabasco, nos costó trabajo conseguir escuelas para que los inscribieran; ya se pueden imaginar las que hemos pasado. Ellos saben que desde niños hemos tenido carros de vigilancia enfrente de nuestra casa", añadió.
"Ellos han visto cómo cuando el movimiento en defensa del petróleo, allá por 1995-96, yo traía orden de aprehensión, me metieron todo el código penal, como once delitos. Y entonces, para obligarme a que me amparara o me fugara, pasaban helicópteros del Cisen (el desaparecido Centro de Investigación y Seguridad Nacional). Estaba (Jorge) Tello (como director) en el Cisen. Y Roberto Madrazo de gobernador.
"Entonces, se quedaban los helicópteros encima de la casa. Entonces ya ellos ya saben qué es esto".
"Le agradezco mucho a Lourdes Galaz, una periodista y a Carmen Lira (ahora directora general de La Jornada) que los fueron a buscar … a mis hijos “, expresó con voz entrecortada.
Pero el presidente al mismo tiempo se mostró orgulloso de sus hijos (cuatro varones). “Me da mucho orgullo que resistan, y se han portado bien, aunque saben que una cosa es lo famliar y otra cosa es el servicio público. Lo saben perfectamente”.