Los Ángeles., Ivan Reitman, el aclamado productor y director de comedias como Los cazafantasmas y Animal House que influyó en una generación de cinéfilos, murió a los 75 años.
Nació en Komarno –ahora es Eslovaquia– el 27 de octubre de 1946. Sus padres judíos sobrevivieron a los nazis, pero cuatro años después del nacimiento de Ivan huyeron de Checoslovaquia para instalarse en Toronto.
Jason, hijo de Reitman, es un popular director de películas como Juno y Ghostbusters: el legado.
Sony Pictures rindió homenaje a “un gran talento y un hombre aún mejor. Esta noche, la dama de la antorcha llora, al igual que todos nosotros en Columbia y los amantes del cine de todo el mundo. Ivan Reitman fue una parte inseparable del legado de este estudio y un amigo”, dijo Tom Rothman, director ejecutivo, en un comunicado en la cuenta de Twitter del estudio.
La noticia provocó una ola de manifestaciones de pesar, incluidas las estrellas de Los cazafantasmas (1984), una de las comedias más populares.
“Estoy profundamente entristecido por la pérdida de Ivan Reitman, un gran hombre y cineasta, a quien tuve el honor de conocer y el privilegio de trabajar”, tuiteó Ernie Hudson, quien interpretó al cazafantasma Winston Zeddemore en el filme original, en la secuela de 1989 y quien hizo un cameo en la versión de 2016.
“Estoy conmocionado”, tuiteó a su vez Paul Feig, quien dirigió la versión de 2016 con un elenco exclusivamente femenino.
En su carrera de décadas, Reitman produjo y dirigió películas que ayudaron a configurar el talento de importantes estrellas cómicas como Bill Murray, quien además de Los cazafantasmas protagonizó los éxitos Albóndigas y El pelotón chiflado, también del director fallecido.
Pero fue Los cazafantasmas lo que catapultó a una dinastía de Hollywood, con la historia de cuatro hombres que se enfrentan a monstruos de malvavisco y espíritus verdes viscosos en un intento por salvar a Nueva York de una invasión sobrenatural que generó décadas de secuelas y nuevas versiones. Los trajes que usan sus cuatro estrellas siguen siendo uno de los disfraces de Halloween más populares y reconocibles hasta el día de hoy.