Que sólo 8 por ciento de la población mayor de 15 años esté separada o divorciada, es indicativo de que los mexicanos todavía apuestan por el matrimonio como “la unión estable de un hombre y una mujer sustentada en el amor, con la finalidad de apoyarse mutuamente y transmitir la vida”, señala el editorial del semanario católico Desde la Fe, de cara al 14 de febrero, Día de San Valentín.
A partir de las estadísticas del Inegi sobre el estado civil de las personas de 15 años en adelante hasta 2020, la Arquidiócesis de la Ciudad de México, en su editorial llegó a esa conclusión, aunque 38 por ciento de esa población está casada mientras 30 por ciento permanece soltera y 20 por ciento vive en unión libre.
Agregó que a 2020 en el país se registraron 33 por ciento menos matrimonios que en 2019, pero también el número de divorcios entre ambos años se redujo. Señaló que las leyes deben apuntar a garantizar la estabilidad del matrimonio y su buen desarrollo.
Consideró que lo anterior, a pesar del cambio de época que ha llevado “a una subvaloración del matrimonio, de múltiples leyes e ideologías que buscan su capa de esta institución, e incluso del mal ejemplo de algunos esposos que aniquilan el deseo de sus hijos a contraer matrimonio”.
Además eso lleva a “hacernos conscientes de que la degradación del tejido social ha caminado de la mano del debilitamiento de las familias, comenzando por la desintegración del matrimonio. No ver esto es una grave miopía o una omisión cargada de intereses que busca minar la sociedad mexicana”.