José Ramón López Beltrán, hijo del presidente Andrés Manuel López Obrador, a través de un mensaje en redes sociales, aclara acerca lo que se ha difundido sobre él y su esposa: “es información falsa, difamatoria. No tengo injerencia alguna en el gobierno de México y desde hace un año trabajo en una empresa de Houston, Texas”. A continuación, el texto íntegro:
“En el año 2018 tomé la decisión de seguir ejerciendo mi profesión de abogado, hasta que decidimos en familia mudarnos a Estados Unidos. En la actualidad y desde el año 2020 trabajo como asesor legal de desarrollo y construcción para KEI Partners, https://www.keipartners.com, una empresa privada en Houston a través de la cual recibí mi visa de trabajo TN. Soy un ciudadano privado, y no tengo injerencia alguna en el gobierno de México. Mis ingresos provienen al cien por ciento de mi trabajo en Houston. No hubo ni habrá conflicto de interés. Les pido respeten mi vida privada y la de mi familia”.
Su esposa Carolyn Adams, también en un mensaje en redes sociales, hizo otra aclaración. A continuación el texto íntegro:
“Mi vida siempre ha sido privada y me he mantenido al margen de cualquier circunstancia, pero dada la situación quisiera hacer unas aclaraciones:
“En las últimas semanas mi familia se ha visto gravemente expuesta por un sin fin de noticias falsas publicadas en distintos medios de comunicación, difamándonos y calumniándonos, perturbando nuestra vida privada, algo que es inadmisible. Todo lo que se ha dicho y publicado sobre nosotros en referencia a cualquier vinculación con la compañía Baker Hughes es FALSO.
“En resumen, muy corto, explico lo siguiente: soy una ciudadana estadunidense de origen brasileño, de padre norteamericano y madre brasileña. Estudié en San Diego, donde obtuve la beca Bill Clinton (The William Jefferson Clinton Scholarship), la cual me proyectó para estudiar y hacer mis prácticas en Emiratos Árabes Unidos, lugar donde empecé a trabajar en el sector energético y unos años después con la familia real de Emiratos.
“También trabajé en la Organización de Naciones Unidas (ONU), en la ciudad de NY. Seguí ejerciendo mi profesión en el mismo sector y esto me llevó a trabajar unos años más tarde en México.
“Pasaron los años y conocí a José Ramón y consecuentemente formamos una familia. Por las circunstancias decidimos salir de México para seguir preservando nuestra privacidad y no causar ningún tipo de conflicto de interés. Siempre hemos trabajado y JUNTOS seguiremos construyendo con y para nuestros hijos.
“Por lo tanto, decidimos rentar una casa en la cual, en la actualidad, ha dado de que hablar y ha generado información distorsionada.
“1. YO renté una casa por un año. José Ramón seguía en el trámite de su visa para residir y trabajar en Estados Unidos.
“2. Aquí se tiene que usar a un agente inmobiliario CON licencia y rara vez se conocen las partes (arrendador y arrendatario).
“3. Todo se hizo bajo formalidad, reglas y requisitos estadunidenses: contrato, depósito en garantía, rentas mensuales (como cualquier otro).
“4. Aunque en México trabajé en el sector energético, jamás tuve relación alguna con Baker Hughes ni ninguno de sus ejecutivos.
“5. Después de rentar, adquirí una casa hipotecada como cualquier ciudadano en este país y el banco se encargó de revisar a detalle todo.
“6. Tengo un vehículo que sigo pagando, detalle que no incluyeron las supuestas “investigaciones”.
“7. Expusieron con base de calumnias y difamación nuestra seguridad”.