La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, consideró que el programa Sí al Desarme, Sí a la Paz, vinculado con otros acciones de prevención, ha permitido reducir en la ciudad 60 por ciento la incidencia delictiva, en particular por lesiones por disparo de arma de fuego.
La mandataria instaló un módulo en la capilla de San Mateo Apóstol y Evangelista, en la alcaldía Coyoacán, donde se informó que en lo que va del año se han entregado 102 armas, entre ellas tres fusiles, dos subametralladoras calibre 22, un rifle M1, un fusil automático y una subametralladora, las cuales serán destruidas.
Ante vecinos que acudieron al acto, Sheinbaum reflexionó cómo un joven puede involucrarse en una banda delictiva, adquirir un arma y ser capaz de cometer un homicidio. “Para nosotros no es que la maldad venga de nacimiento, no es que una persona nazca buena o mala, realmente son las circunstancias, tanto familiares como sociales, que provocan que un niño o una niña desde pequeño, o un joven, se acerque a la delincuencia”.
Agregó que el trabajo de su gobierno es dar todas las condiciones para que los jóvenes de la ciudad no tengan que llegar jamás al camino de las armas y la única manera de hacerlo es otorgarles derechos, pero acotó que eso también depende de su familia. “Que le den amor a sus hijos, que esté atenta a lo que ocurre en el núcleo familiar”.
Sheinbaum señaló que la instalación de estos módulos permite alejar a las familias que habitan en la ciudad de posibles actos delictivos al intercambiar las armas por recursos económicos.
Indicó que esta estrategia se conjunta con otras acciones integrales de prevención y construcción de la paz como los Pilares y el programa Barrio Adentro.
A su vez, el secretario de Gobierno, Martí Batres, consideró que cada arma que se entrega es una vida más que se salva. “Más o menos un tercio de los homicidios en la ciudad se debe a riñas en los barrios”.