Londres. La farmacéutica sueco-británica AstraZeneca reportó este jueves una caída de 90 por ciento anual de ganancias durante 2021, pese a un aumento en la facturación impulsada por la venta de vacunas de Covid-19, debido en particular a la costosa compra de Alexion.
AstraZeneca recibió en julio la aprobación de las autoridades británicas para la adquisición por 39 mil millones de dólares de la empresa biotecnológica estadunidense Alexion, especializada en enfermedades raras.
El beneficio neto del grupo se situó el año pasado en 112 millones de dólares, frente a los tres mil 200 millones de dólares de 2020.
Su vacuna contra el coronavirus, Vaxzevria, alcanzó una facturación anual de casi cuatro mil millones de dólares.
Sin embargo, esta vacuna no fue seleccionada para las dosis de refuerzo en Reino Unido, aunque había sido la principal utilizada en este país para las dos primeras dosis, junto con Pfizer/BioNTech y en menor medida Moderna.
Los países desarrollados favorecen ahora las vacunas de tipo ARNm como la de Pfizer, y el suero de AstraZeneca se destinará principalmente al programa internacional Covax para los países en desarrollo.
La compañía afirmó que el interés mundial por los acuerdos de compra de su vacuna por parte de los gobiernos se vio impulsado por la fuerte demanda en América Latina, Oriente Medio y Asia.
El grupo prevé para 2022, con el aparente retroceso de la pandemia, que “las ventas totales de medicamentos relacionados con el Covid-19 disminuyan en torno a 20-25 por ciento, con un descenso de las ventas de Vaxzevria en particular que se compensará parcialmente con el crecimiento de las ventas de Evusheld”, su tratamiento preventivo de anticuerpos monoclonales para personas inmunodeprimidas.
AstraZeneca también señala que “la mayor parte de los ingresos de las vacunas en 2022 deberían provenir de nuevos contratos”, y prevé que “el margen bruto de los medicamentos contra el Covid-19 sea inferior a la media de los otros” productos del grupo.