Washington. Murió Jon Appleton, compositor y profesor, así como pionero de la música electrónica y electroacústica; ayudó a desarrollar el Synclavier, uno de los primeros sintetizadores digitales.
El deceso ocurrió el 30 de enero en Vermont, a los 83 años, comunicó ayer uno de sus hijos.
Nacido en Los Ángeles, se integró al Dartmouth College en 1967 y desarrolló uno de los primeros programas y estudios de música electrónica en Estados Unidos.
“La suya fue una visión pionera para crear un centro de música electrónica en esa institución, a la cual impulsó muy rápidamente a la vanguardia del trabajo en los géneros electrónico y electroacústico”, explicó su amigo Theodore Levin, profesor de música en ese centro de estudios.
Si bien fue visionario y uno de los pioneros del sonido electrónico y electroacústico, contrariamente a los estereotipos, “no era un geek ni un loco de los engranajes que giraba perillas para producir ruidos extraños”, particularmente en los primeros años, afirmó Levin.
“En el fondo, era una especie de romántico musical”. El interés de Appleton en la música electrónica estaba del lado de la electroacústica, “como forma de ampliar las posibilidades expresivas y el potencial de los instrumentos musicales acústicos y la voz humana”, agregó.
Al desarrollo del Synclavier, en 1975, además de Appleton, también contribuyeron Thayer Sydney Alonso, profesor de investigación de la escuela de ingeniería de Dartmouth, y Cameron Jones, estudiante.
El artefacto se convirtió en el Rolls Royce de la industria de la música, pues se vendió entre 75 mil y 500 mil dólares y fue utilizado por Sting, Stevie Wonder, Frank Zappa y muchos otros artistas, según la revista Dartmouth Engineer.