Londres. La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, dijo el miércoles que no existe un modelo único de monedas digitales para todos los países y que podrían aportar algunos beneficios.
Si las monedas digitales de bancos centrales (MDBC) se diseñan “con prudencia” podrían ofrecer más resistencia, facilitar el acceso de los ciudadanos a servicios de tipo bancario y reducir el costo de la circulación del dinero, apuntó Georgieva en su discurso sobre un informe del organismo acerca de las monedas digitales.
Además consideró que deberían ser más seguras, en comparación con los “criptoactivos sin respaldo que son intrínsecamente volátiles”, así como con las stablecoins mejor gestionadas y reguladas, que suelen estar vinculadas a una moneda subyacente.
El FMI calcula que casi 100 países están estudiando la posibilidad de crear monedas digitales, en el documento que se dio a conocer el miércoles se analizan seis naciones, entre ellas China, Suecia y las Bahamas, en las que el dinero digital ya está funcionando o se encuentra en una fase avanzada de pruebas.
Georgieva dijo que la principal conclusión de las primeras experiencias era que había lecciones que aprender.
“En primer lugar, no hay una talla única para todos”, señaló.
En segundo lugar, las consideraciones de estabilidad financiera y privacidad son primordiales para el diseño de las CBDC, mientras que también es necesario un equilibrio entre los avances en el frente del diseño y en el frente de la política monetaria, indicó.
“Todavía es pronto para los MDBC y no sabemos muy bien hasta dónde llegarán y a qué velocidad”, añadió.