Washington. Douglas Trumbull, un maestro de los efectos visuales que mostró al público imágenes indelebles del futuro y del espacio en películas como 2001: Una odisea del espacio, Encuentros en la tercera fase y Blade Runner, ha muerto por complicaciones del mesotelioma. Tenía 79 años.
El director Edgar Wright tuiteó: “RIP a un visionario real, Trumbull... dirigió uno de mis favoritos de la infancia, la joya de la ciencia ficción Silent Running.
El productor y documentalista Charles de Lauzirika, quien trabajó con Trumbull en Blade Runner: The Final Cut, escribió que “no sólo estaba innovando imágenes magníficas, sino que también perseguía las grandes ideas detrás de cualquier historia que estaba contando”.
Nacido en Los Ángeles en 1942, hereda el legado de su padre, supervisor de efectos visuales, quien trabajó en El mago de Oz. Trumbull comenzó en Graphic Works Films, donde un corto suyo llamó la atención de Stanley Kubrick, quien estaba comenzando a trabajar en 2001: A Space Odyssey. A los 23 años, no sólo se convenció de un trabajo clave en 2001, sino que también ayudó a innovar el proceso que se usaría para crear la icónica secuencia del portal estelar.
A lo largo de su carrera impulsó técnicas cinematográficas como la fotografía de escaneo de hendidura. También desarrolló el proceso de filmación Showscan, en el que una película de 70 mm se proyecta a 60 fotogramas por segundo para crear una sensación de realismo realzado.
Después de hacerse un nombre en 2001, trabajó en la adaptación de Robert Wise de The Andromeda Strain, Close Encounters of the Third Kind de Steven Spielberg, Star Trek: The Motion Picture de Wise y Cazarecompensas.
Hizo su debut como director con Silent Running, una película de ciencia ficción distópica protagonizada por Bruce Dern en la que la vida vegetal se está extinguiendo en la Tierra. Roger Ebert, en su reseña, escribió que Trumbull “es uno de los mejores hombres de efectos especiales de ciencia ficción. Silent Running, que tiene efectos de espacio profundo iguales a los de 2001, también lo presenta como un director inteligente, si no sensacional”.