Washington. Para curar heridas, los chimpancés atrapan insectos y los aplican de forma directa sobre la zona afectada.
Los científicos observaron este comportamiento en chimpancés en Gabón, sobre la costa atlántica central de África, y notaron que no sólo usan insectos para tratar sus heridas, sino también las de sus pares.
La investigación, publicada el lunes en la revista Current Biology, es una contribución importante al debate sobre la capacidad de los chimpancés, y de los animales en general, de ayudar desinteresadamente a los demás.
Es como “cuando vas a la escuela y lees en tus libros de biología las cosas asombrosas que pueden hacer los animales”, explicó Simone Pika, bióloga de la Universidad de Osnabruck en Alemania y coautora del estudio. “Creo que esto realmente podría ser algo que termine en esos libros”.
El proyecto comenzó en 2019, cuando se observó a una chimpancé adulta llamada Suzee inspeccionar una herida en el pie de su hijo adolescente.
De repente, Suzee atrapó un insecto en el aire, se lo metió en la boca, aparentemente lo apretó y luego lo aplicó sobre la herida de su hijo unas tres veces.
La escena se produjo en el Parque Nacional de Loango, en la costa atlántica de Gabón, donde investigadores estudian a un grupo de 45 chimpancés centrales, una subespecie del común, en peligro de extinción.
Durante los siguientes 15 meses, los científicos vieron a los chimpancés administrarse el tratamiento al menos 19 veces.
En otras dos ocasiones observaron que chimpancés heridos eran tratados de la misma manera por uno o varios de sus pares.
Las heridas, a veces de varios centímetros de ancho, pueden provenir de conflictos entre miembros del mismo grupo o de uno contrario.
Lejos de protestar por el tratamiento, los magullados estaban felices de ser atendidos.
“Se necesita mucha confianza para poner un insecto en una herida abierta. Parece que entienden que si me haces esto con este animal, mi herida mejorará. Es asombroso”, sostuvo Pika.
Los investigadores no han podido identificar qué insecto se usó en las heridas, pero creen que se trata de uno volador debido al rápido movimiento de los chimpancés para atraparlo.
Probable sustancia antinflamatoria
Pika dice que el insecto podría contener sustancias antinflamatorias con un efecto calmante.
Se sabe que los insectos tienen varias propiedades médicas y los investigadores deberán detectar y estudiar al insecto en cuestión.
Ya se ha observado que pájaros, osos, elefantes y otros animales se automedican, por ejemplo, comiendo plantas.
Pero lo que es único acerca de los chimpancés es que no sólo se tratan a sí mismos, sino que también ayudan a los demás.
Algunos científicos aún dudan, sin embargo, de la capacidad de las especies animales para exhibir comportamientos prosociales, como cuidar desinteresadamente a los demás, agregó Pika.
Pero aquí los chimpancés no tienen nada que ganar, subrayó. Entonces, ¿por qué lo hacen?
En los humanos, el comportamiento prosocial generalmente se relaciona con la empatía.
¿Podría el mismo sentimiento estar presente en los chimpancés?, se preguntó Pika.
“Es una hipótesis que debemos investigar”, afirmó.