La violencia criminal en Zacatecas, que el fin de semana dejó un saldo de 16 homicidios, es un acto de “provocación” a la autoridad, aseveró el presidente Andrés Manuel López Obrador.
En Palacio Nacional, se le inquirió si, aun con mayor presencia de fuerzas federales, consideraba los ataques un desafió de la delincuencia organizada, y respondió: “Sí, es un acto de provocación, además de los lamentables asesinatos. En uno de estos actos, donde dejaron cuerpos, se descubrió un dron que estaba tomando, o sea, estamos hablando de un acto propagandístico”.
El mandatario comprometió mayor intervención de las fuerzas armadas en el estado, pero sobre todo se enfocará en la inteligencia policiaca y militar para salvaguardar la seguridad de la sociedad.
Interrogado acerca de los sucesos violentos en Zacatecas, entidad donde convergen diversas rutas hacia el norte del país, y donde hay mayor presencia federal, así como operaciones de seguridad que se reforzaron hace unos meses, el tabasqueño dijo: “Sí, es un acto de provocación... Y es un enfrentamiento de grupos, pero también hay mucho de provocación. Nada más que nosotros vamos a seguir actuando igual: con rectitud, con principios. Ya no es el tiempo de antes, de que la autoridad se sometía a la delincuencia o la autoridad la representaba. Ahí vamos y vamos a seguir avanzando”.
En Zacatecas, añadió, “se hizo ya un análisis, una revisión. Se va a reforzar con más presencia y otras actividades y mucha inteligencia. Es más importante a veces la inteligencia que el uso de las corporaciones o su presencia”.
– ¿Se puede saber en qué medida habría un reforzamiento y a partir de cuándo?
–Ayer mismo hubo una reunión de representantes del gabinete de seguridad federal con el gobierno del estado, y ya se tomaron medidas.
–¿Qué implica este reforzamiento, Presidente? ¿Un mayor envío de elementos?
–Más elementos y otras acciones que no puedo repetir, pero vamos a continuar garantizando la seguridad del pueblo de Zacatecas porque es nuestra responsabilidad.
En tanto, el gobernador David Monreal Ávila y su secretario de Seguridad Pública, el general retirado Adolfo Marín, acompañados por Saúl Monreal Ávila, alcalde de Fresnillo –la demarcación del país cuyos habitantes tienen la mayor percepción de inseguridad según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía– encabezaron ayer la entrega de decenas de armas largas y cortas, así como patrullas, a los directores de 17 corporaciones municipales, como parte de la estrategia para intentar contener la violencia.
En el acto, realizado en la sede de la secretaría de seguridad pública de la ciudad de Guadalupe, conurbada a la capital, David Monreal anunció que la medida forma parte del Plan Zacatecas 2 de seguridad pública que López Obrador anunció el pasado 24 de noviembre en una visita al estado. En las últimas 12 horas, en territorio zacatecano al menos seis personas fueron ejecutadas: tres en un bar de Fresnillo, dos en Guadalupe y una en Villanueva.
Además, fuentes de la fiscalía identificaron siete de los 10 cadáveres abandonados el sábado en la comunidad rural de Pardillo Tercero. Se confirmó que entre las víctimas está Gerardo Ortega Rodríguez, secuestrado hace dos semanas en Fresnillo y quien es hermano del diputado local migrante Sergio Ortega Rodríguez, de Morena.
A la firma del convenio acudieron los ediles y directores de seguridad de Fresnillo, Jerez, Cuauhtémoc, Villa García, Villa Hidalgo, Pánfilo Natera, Enrique Estrada, Loreto y Pánuco, así como de Genaro Codina, Luis Moya, Vetagrande, Cañitas de Felipe Pescador, Ojocaliente, Trancoso y Juan Aldama.