La eliminación del Monterrey en el primer partido del Mundial de Clubes en Abu Dabi fue un golpe muy fuerte para la afición, que reaccionó con repudio enfurecido en México y en los Emiratos Árabes. Tras la derrota ante el Al Ahly de Egipto, ahora sólo puede a aspirar a un cierre digno ante el Al Jazira local, por el quinto lugar.
En la conferencia virtual desde Abu Dabi, el entrenador Javier Aguirre y el defensa central Héctor Moreno asumieron la pesada carga de la derrota y trataron de digerirla para encarar el próximo partido con mejor ánimo.
“No podemos detenernos”, dijo Aguirre; “ya no podemos cambiarlo, tenemos que ver hacia adelante, no hay otra fórmula; tenemos la confianza de la directiva”.
La noche de la derrota, los aficionados rayados que viajaron a Abu Dabi estaban furiosos. Un puñado de seguidores se apostaron frente al autobús que transportaba al equipo y les reclamaban la falta de compromiso.
Aguirre respondió que entendía el malestar con el equipo, por eso habían expresado sus disculpas desde el plantel y la directiva.
“Ya pedimos una disculpa a la afición”, comentó el Vasco; “lo hizo también la directiva en redes sociales; no nos queda más que ganar el siguiente partido, eso es lo que tenemos que hacer”.
Moreno dijo que los jugadores también compartían la desilusión de los aficionados. Sin embargo, cuando abordó la manera como reaccionaron los seguidores enfurecidos, amagó con expresarse y de pronto decidió callar.
“Entendemos la desilusión y la tristeza, nosotros la tenemos, porque nos creíamos con la capacidad de algo más, no fue así, pero que la afición haya reaccionado de esa manera, tampoco creo que… bueno, no quiero hablar más”, dijo el jugador.
No hay más, coincidieron, que sacar el partido pendiente del Mundialito y en eso Aguirre no compartió del todo la idea que su equipo se encuentre “en el piso”.
“Decir eso, estar en el piso, aseverar eso es difícil. Monterrey ha participado cinco veces y no ha conseguido levantar el título, pero no falla el penal quien no lo tira, estamos aquí porque ganamos genuinamente. No podemos lamentarnos”.