Las Vegas., La diversión en torno al futbol americano y los concursos en la antesala del Tazón de los Profesionales, que por quinta vez consecutiva se adjudicó ayer la Conferencia Americana (AFC) al derrotar 41-35 a la Nacional (NFC), no ha impedido que algunos de los principales jugadores de la NFL reflexionen sobre las inequidades raciales denunciadas por Brian Flores.
El ex entrenador de Miami presentó una demanda contra la liga, Delfines, Denver y Jets, por discriminación racial; ayer el equipo de la Florida anunció como nuevo entrenador en jefe a Mike McDaniel.
“Pienso que no hace falta decir que tenemos un problema”, dijo Matthew Slater, el receptor veterano y as de los equipos especiales de los Patriotas de Nueva Inglaterra.
“No sé si es el proceso. No sé a qué quieran atribuir esto. Pero uno mira el resultado final y es que la liga está conformada por 60 por ciento de jugadores y apenas un entrenador afroestadunidense. Sólo hay un dueño de las minorías, no vemos mucha representación en las gerencias ni en los puestos ejecutivos. Para mí, esto dice que tenemos un problema.”
La demanda de Flores fue un recordatorio, incluso para los jugadores de elite, de que hay mucho trabajo por hacer en su deporte para lograr la equidad.
“Siento que los entrenadores afroestadunidenses a veces son desfavorecidos, de modo que simplemente hay que encontrar una forma de que esto funcione”, comentó Darius Leonard, linebacker de Indianápolis.
“Muchos dueños a puerta cerrada dicen muchas cosas, y como jugadores no las vemos. De algún modo vamos a encontrar la manera de que haya una plataforma más pareja para todas las razas, no sólo para blancos o negros. Tenemos que asegurarnos de que haya las mismas oportunidades pa-ra todos.”
Flores demandó a la liga y a tres equipos esta semana por prácticas racistas en la contratación de entrenadores y ejecutivos; afirma que la discriminación es abundante, pese a que ante la prensa la NFL defiende la equidad racial.