El Instituto Nacional Electoral aprobó emitir la convocatoria para la revocación de mandato que se efectuará el 10 de abril al cumplirse los requisitos legales para que se lleve a cabo. En principio, con su publicación pasado mañana, se iniciará formalmente el proceso durante el cual la promoción del ejercicio será facultad exclusiva del INE y los institutos locales; ningún funcionario público podrá promoverlo, incluido el presidente Andrés Manuel López Obrador, y tampoco los partidos políticos.
A partir de su publicación en el Diario Oficial de la Federación, el INE iniciará su difusión, la cual deberá realizarse, según lo estipula la Ley Federal de Revocación de Mandato, de forma neutral. Con base en dicho precepto, ese mismo día deberá suspender toda propaganda gubernamental de cualquiera de los tres órdenes de gobierno (federal, estados y municipios), salvo para campañas de salud, educación y protección civil.
De manera análoga a las restricciones que prevalecieron durante la consulta popular, López Obrador no podrá promover la realización aun cuando está su cargo en juego. De acuerdo con la ley de revocación, para que los resultados sean vinculantes (para el caso de su eventual remoción) deberá haber una participación ciudadana de al menos 40 por ciento del listado nominal y, de darse ese caso, el resultado causaría efecto cuando el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación “emita la declaratoria de revocación”.
Durante la sesión, el representante de Morena, Mario Llergo, propuso y se aprobó que se incorporara en la convocatoria la posibilidad de los ciudadanos de expresar sus posturas sobre este proceso, con las restricciones establecidas en la ley, esto es, nadie podrá contratar espacios en radio y televisión para difundir su realización. Para su correligionario, César Hernández, el ejercicio refuerza el control popular sobre el gobierno, le otorga al ciudadano el derecho a supervisar y exigir rendición de cuentas.
El consejero presidente, Lorenzo Córdova, adelantó que será el lunes 7 de febrero cuando aparezca en el DOF, a partir de lo cual “el INE detonará toda la cadena de actividades que hacen posible el voto, desde la contratación supervisoras y capacitadoras electorales, la visita a la ciudadanía insaculada y la capacitación de funcionarios de casilla, hasta la impresión de materiales”.