Zapotlán de Juárez, Hgo., El gobierno de México propuso a la estadunidense Legacy Vulcan –y a su subsidiaria Calizas Industriales del Carmen (Calica)– utilizar con fines turísticos los terrenos de la Riviera Maya que le fueron concesionados, sin límite de tiempo, el último día del sexenio de Ernesto Zedillo, y suspender en máximo un mes la extracción de recursos naturales.
De no aceptar el plan, México acudirá a tribunales internacionales y a la ONU para interponer demandas y exhibir a esa compañía por daños al país, advirtió el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Desde el inicio de la semana el mandatario criticó a los “seudoambientalistas” que en su momento no protestaron por esta concesión, con base en la cual una empresa constructora cava terrenos paradisíacos de México –a unos mil metros de la playa– para exportar materiales a Estados Unidos. Desde 2018, Legacy interpuso una demanda en el marco del TLCAN y exige una compensación de más de mil millones de dólares más intereses.
Como primer paso, López Obrador instruyó al embajador de México en el país vecino, Esteban Moctezuma, exponer la propuesta al presidente de la compañía, quien –se informó ayer– hará saber la alternativa gubernamental a los integrantes del consejo de administración.
Los terrenos se encuentran en un área de 4 mil 200 hectáreas. Son tres predios y un muelle. Una de las minas sigue siendo explotada y dos están sin actividad.
El mandatario lamentó que en aquel tiempo, finales de 2000, el gobierno no puso siquiera un límite a la concesión, lo cual sobrepasa incluso el permiso por un siglo que se dio en el sexenio salinista para la operación del puerto de Veracruz.
En los otros dos terrenos el plazo ya se venció, motivo de las demandas interpuestas. Sin embargo, en todo lo que se ha cavado han quedado marcas, socavones, por lo que de esa degradación resurge el agua azul turquesa del mar, en Playa del Carmen.
“Todo este material se lo llevan a Estados Unidos, porque es una empresa que se dedica a construir carreteras. Allá además tiene la concesión de un muelle”, señaló.
Por lo anterior, reiteró que ya no se permitirá la extracción y, a cambio, el gobierno ofrece dar facilidades para que se finque ahí un proyecto turístico con respeto a las normas de uso de suelo, “es decir, no se trata de construir 20 mil cuartos de hotel, sino los que de conformidad con la norma puedan realizarse”.
Y desde luego, subrayó, que quiten las demandas porque de lo contrario “vamos a proceder, a defendernos legalmente”, porque tienen permisos vencidos. “Tenemos deseo de arreglo”, expresó, frente a esa empresa que tiene mucha influencia en tribunales.
(Con información de Fabiola Martínez).