En medio de la cuesta de enero, el disparo de contagios por ómicron y un menor crecimiento, la percepción de los consumidores sobre el momento actual y futuro de la economía mexicana y la de sus bolsillos empeoró al arranque del 2022, reveló este jueves el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El sentimiento de los mexicanos, medido por el Indicador de Confianza del Consumidor (ICC) elaborado de manera conjunta por el Inegi y el Banco de México, registró una reducción mensual de 0.9 puntos en enero con relación a diciembre pasado, cuando retrocedió 1.6 unidades. Es su segunda caída consecutiva y la primera para un primer mes desde 2018.
La situación económica de los ciudadanos al no poder ahorrar, tener poca esperanza de empleo en el próximo año y la perspectiva de que los precios al consumidor seguirán subiendo, mantuvo cabizbaja la perspectiva del consumidor, una de las señales que advierten un golpe a la economía, según los indicadores complementarios del ICC.
Covid, factor clave
El Inegi precisó que la disminución de la confianza del consumidor se explicó por el descenso de los cinco componentes que integran el indicador. Los datos que arrojó la Encuesta Nacional sobre Confianza del Consumidor (ENCO) que recaban de manera conjunta el Inegi y el Banco de México en 32 ciudades del país, reflejaron que las familias mexicanas están temerosas de la situación presente y futura de la economía de su hogar y del país, lo cual no le permite realizar compras de bienes duraderos.
La percepción actual de la situación económica del país, comparada con la de hace 12 meses, cayó 1.8 por ciento en enero y fue el componente que más bajó; mientras la situación económica esperada de los miembros del hogar dentro de 12 meses, respecto a la actual, descendió 0.6 por ciento.
Así, la posibilidades en el momento actual de los integrantes del hogar, comparadas con las de hace un año, para realizar compras de muebles, televisor, lavadora, otros aparatos electrodomésticos, etcétera descendió 1.3 por ciento en enero.
En su comparación anual, registró un salto de 4.4 puntos; en donde los cinco componentes que integran el indicador mostraron incrementos en enero, donde los avances más moderados se presentaron en la percepción del futuro del país y los hogares.
Analistas económicos de Ve por Más explicaron que los contagios de ómicron y una inflación elevada debilitaron la confianza del consumidor, por lo que prevén que “si el contagio se modera y el empleo sigue mejorando, la confianza podría rebotar próximamente”.