El Gobierno de la Ciudad de México presentó tres prototipos de vehículos de combustión interna reconvertidos a eléctricos con tecnología 100 por ciento mexicana, entre ellos el Tsuru blanco que utilizará en sus actividades diarias Claudia Sheinbaum Pardo, titular del Ejecutivo local.
Se trata de un proyecto que incluye la transformación no sólo de automóviles compactos, sino también de camiones de carga y autobuses de pasajeros con motores eléctricos diseñados y fabricados en el país, en los que las baterías tienen como principal componente el litio.
De allí que la mandataria capitalina se pronunció a favor de que la explotación de ese mineral sea una facultad exclusiva del Estado, como se establece en la reforma eléctrica propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Subrayó que si se permite a empresas extranjeras extraer litio, el país no tendría la posibilidad de desarrollar proyectos como el que realiza su gobierno para reconvertir motores de combustión interna a eléctricos.
Por ello, agregó, es fundamental que el litio sea incluido en la Constitución mexicana como un mineral estratégico para el desarrollo nacional y garantizar la transición energética del país.
“Primero, (el litio) le pertenece a la nación; y, segundo, es el Estado el que debe explotarlo para beneficio de los mexicanos”, argumentó Sheinbaum Pardo.
Ayer, la mandataria capitalina condujo por primera vez el Tsuru blanco con motor reconvertido que utilizará en sus actividades diarias, que tiene una potencia de hasta 150 kilómetros por hora.
Proyecto conjunto
“Ya lo probé, funciona muy bien, y la idea es que una empresa mexicana pueda desarrollarlo y se produzca un vehículo eléctrico hecho en México; de allí la importancia del litio, porque es fundamental para las baterías”, expresó la jefa de Gobierno luego de dar tres vueltas al circuito de la Plaza de la Constitución.
Este es uno de los proyectos que trabajan en conjunto la Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y la empresa Potencia Industrial para el diseño y fabricación de autobuses de pasajeros, mototaxis, camionetas, patrullas ecológicas y camiones de carga de hasta 40 toneladas, eléctricos o híbridos, con tecnología mexicana y en los que el gobierno ha invertido 8 millones de pesos.
Aunado a ello, este año se destinarán 20 millones de pesos para la instalación de un laboratorio de pruebas y de diseño en el que se podrán probar los componentes de los vehículos, baterías, motor y controlador.
El investigador del Instituto de Ingeniería de la UNAM Germán Carmona Paredes destacó que se trata del desarrollo de vehículos completos, por lo que se hacen “trajes a la medida”, según las características que se requieren para que dichos autos circulen en la Ciudad de México, y “tenemos listo todo para poder empezar la producción”.
Si bien el costo de la reconversión oscila entre 450 mil y 600 mil pesos, su mantenimiento es mucho más económico, además del ahorro en combustible, por lo que inversión se recupera a mediano plazo.