Militares, policías y bomberos de Ecuador intensificaron ayer la búsqueda de víctimas entre el fango y los escombros que quedaron en una cancha deportiva en Quito, arrasada por un aluvión que dejó al menos 25 muertos, 53 heridos y seis desaparecidos, de acuerdo con el balance más reciente. Deportistas y público fueron sorprendidos por el lodo que descendió con violencia de las faldas del volcán Pichincha. El lunes cayó un aguacero que se prolongó durante 17 horas. Un embalse que contenía el agua de la montaña, con capacidad para 4 mil 500 metros cúbicos, colapsó al recibir un caudal casi cuatro veces mayor. El gobierno municipal de Quito habilitó seis albergues para dar refugio a unas 348 personas de barrios vulnerables. Foto Afp