A mediados de junio de este año la Misión Colmena de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) colocará cinco nano-robots en la superficie de la Luna y será la primera de una serie de proyectos destinados para el satélite natural de la Tierra, e incluso asteroides, a fin de desarrollar un nicho de tecnología. Navegarán de manera autónoma y luego se ensamblarán para estudiar la forma en que se comporta el polvo del suelo lunar, señaló Gustavo Medina Tanco, académico del Instituto de Ciencias Nucleares (ICN) de la UNAM.
“Colmena tiene una misión internacionalmente original. Colmena es la primera etapa de un nicho de tecnología espacial que queremos desarrollar para que México no participe de esa transformación como un consumidor meramente, sino efectivamente como un actor y un productor de bienes, riqueza, conocimiento y bienestar”.
Durante la presentación de este proyecto, el investigador responsable del Laboratorio de Instrumentación Espacial Linx del ICN, apuntó que Colmena demostrará que robots muy pequeños, pero trabajando en forma coordinada, pueden ser los exploradores y mineros de ese nuevo futuro y de ese nuevo espacio.
Indicó que los pequeños robots pesan menos de 60 gramos cada uno y miden 12 centímetros de diámetro, por lo que su electrónica levitará o se encontrará a menos de dos centímetros del suelo lunar o regolito.
“Nadie ha hecho eso antes, es la primera vez que se va a realizar. Estos cinco robots viajan a la luna acomodados en un contenedor que además es una catapulta para lanzarlos a la luna. Todo estoo pesa menos de 608 gramos, son, para que tengan una idea, más o menos 3 celulares, eso es un desafío de tecnología internacional y es la primera vez que se hace y lo hace México y la UNAM”.
El científico reiteró que estos robots van a valorar la posibilidad de sobrevivir en esas condiciones agresivas del espacio y del regolito, de demostrar que se puede o no navegar en ese polvo. “Cada uno de sus cinco robots es un elemento sofisticado que tiene sus propios censores, sistemas de misión de diferentes frecuencias, de radiofrecuencia para comunicarse con el contenedor, todo eso se puede utilizar para sacar información de lo que es la dinámica del plasma polvoroso, que está muy cerca de la superficie lunar que nadie ha realizado antes”.
Acompañado por el rector Enrique Graue Wiechers; el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubón, y Omar Fayad Meneses, gobernador del estado de Hidalgo, Medina Tanco agregó que la Misión Colmena será transportada hasta la luna por la nave Peregrine de la empresa estadunidense Astrobotic, que también llevará experimentos de otros países y de la NASA.
“Ya fue integrada a la nave Peregrine en Pittsburgh, Estados Unidos, a finales del año pasado. El lanzamiento se espera para junio de este año. El alunizaje será 40 a 60 días después del lanzamiento, dependiendo de la trayectoria que se utilice para llegar a la luna y la misión. Una vez en la luna, tendrá una duración de aproximadamente 9 a 10 días terrestres durante un día lunar”.
“Colmena no es una única misión, esto no es un único evento, es la primera de una serie de misiones que pretendemos realizar a la luna primero y en asteroides después, esto, porque queremos desarrollar una herramienta tecnológica para México, que tenga un valor científico y comercial con el cual pueda participar efectivamente en grandes consorcios. Ya estamos trabajando en la segunda misión. Estamos empezando a investigar en los nuevos robots, que son más orgánicos. También estamos conversando también con empresas lanzadoras”.