Oaxaca, Oax., El Museo de Arte Contemporáneo (MACO) no cerrará sus puertas, aseguró el presidente de la Asociación Civil Amigos del MACO, Rubén Leyva. Al contrario, se trabaja en su apertura, prevista para su 30 aniversario, en marzo, aunque dependerá de cómo se avance en la resolución de una serie de problemas que existen, incluso la demanda de ex trabajadores de esta institución, señaló.
Leyva explicó que la crisis en el MACO se inició por la falta de comprobación de recursos correspondientes al año fiscal 2019 ante la Secretaría de Cultura, que corresponden a un millón 600 mil pesos.
Entre los problemas, mencionó que se realizaron exposiciones fuera de programa, se siguió contratando personal –al que los integrantes de la AC no conocen físicamente–, se hicieron compromisos en el sentido de que algunos empleados tendrían trabajo vitalicio y el acervo estaba abandonado, y entre otros que se darán a conocer, apuntó.
Respecto del acervo, Leyva afirmó que éste se encontraba “tirado”, por lo que se tuvo que iniciar un proceso de rescate a fondo; actualmente, añadió, se ha avanzado 90 por ciento en esa labor de la mano del nuevo director, Óliver Martínez Kandt. Desafortunadamente, lamentó Leyva, hay piezas con daños graves que no podrán recuperarse, afectaciones sobre las que prefirió no ahondar y esperar que se presente de manera oficial la auditoría.
El director explicó que cuando los Amigos del MACO tomaron control del museo, había 19 trabajadores reconocidos por la parte patronal, no obstante que originalmente eran 12, por lo que se contrató a siete personas sin autorización, de los cuales cuatro empezaron a trabajar antes y durante la pandemia de covid-19, o sea, cuando los problemas financieros ya existían.
Leyva y Martínez añadieron que de los 12 trabajadores originales a cinco se les continúan pagando sus salarios y siguen laborando en la institución; el resto mantiene una demanda laboral ante la Junta Local de Conciliación y Arbitraje (JLCA) de Oaxaca, aunque en este caso, añadió el primero, hay personas que ya no trabajaban y aun así fueron incluidos en la demanda.
Por su parte, los ex empleados del MACO advirtieron que de ninguna manera permitirán que el museo reinicie operaciones en tanto no se resuelva la demanda que sostienen ante la Junta: “No vamos a permitir que se abra hasta que nos paguen hasta el último centavo, por que no se vale que de un momento reinicien labores como si no hubiera pasado nada, todo bien y todos muy alegres”. Hasta ahora la demanda por salarios adeudados no ha tenido avances, pues desde 2021 no se ha convocado a una nueva audiencia.
Añadieron que ya se interpuso otra demanda por despido injustificado; respecto de ésta, explicaron que la primera audiencia se programó para el 23 de febrero, y urgieron a la Junta Local de Conciliación y Arbitraje a que dé celeridad a estos dos casos y se puedan resolver lo antes posible, de tal forma que el MACO pueda reiniciar operaciones en las mejores condiciones.