Ciudad de México. La antigua tradición del Niño Dios ha sobrevivido a todos los cambios tecnológicos, este año como siempre la gente se afana en vestir y engalanar a esos infantes siguiendo las tendencias actuales.

Este año, según el catálogo anual de los modelos para vestir al niño Jesús, estos pueden lucir como el niño de la abundancia, de doctor, de la salud pero también de modelos muy tradicionales como el del santo niño de Atocha, que algunos clientes indican “es muy milagroso”.

Ultimamente ha causado furor el vestido estilo árabe o el atuendo propio de los palestinos de la época de Cristo.

El ajuar puede incluir el tradicional ropón, los zapatitos, un fondo, el calzoncito, una corona y un cuernito y algunos de los atuendos incluyen semillas de maíz, trigo o lentejas como símbolo de la abundancia.

Otros otros requieren sillitas y cetros, según el catálogo del local “Creaciones Guadalupe” que ofrece todo lo que se necesita “para vestir impecable a tu niño Dios”.

El atuendo más solicitado este año es del niño de la salud, “de hecho ahorita ya está agotado”, comenta el joven Irving Garcia Carbajal, mientras alista varios vestiditos que ya están listos para entregar en un local ubicado en la calle de Talavera.

Comenta que los vestidos de los niños de la salvación, del trabajo y de la protección fueron los primeros en agotarse y el del atuendo del niño de la abundancia ya quedan muy poquitos.

Los vestidos tienen colores definidos, como el salmón que se usa para el niño de la abundancia que también lleva semillas de frijol, lentejas, maíz quebrado, una monedita.

Magdalena Aguilar vecina de Iztapalapa quien se dedica a vestir estas figuras desde hace 25 años, asegura que el atuendo que más se está pidiendo en la Colonia Mixcoatl de la demarcación donde vive es el del doctor, el de la sanacion, la salud es lo que están pidiendo más el blanco. “Y es que ahorita estamos pidiendo por salud; ahora si que por cosas materiales ya no y según su vestido uno le pide”.

Otro ajuar que piden mucho es el del “divino niño” cuyo atuendo es de color fucsia.

La figura de este niño es parte de las estatuas que fueron donadas por varias familias y que ubicaron en la calle de Talavera como parte del remozamiento que hicieron autoridades hace casi 10 años en ésta, comentan comerciantes.

La placa de la estatua dedicada al divino niño, reza que este es venerado en el santuario que lleva su nombre en Bogota, Colombia, y que fue donado por una familia de artesanos.

Janet Palacios quien junto con su esposo se dedica a reparar estas figuras comenta que la tradición está amenazada por “la prisa y que la gente ya no se de tiempo para seguir la tradición ya no tienen paciencia todo quieren rápido o porque la gente se cambia de religión y simplemente abandonan al niño y ya no regresan”.

Pero esta tradición también hecha mano de herramientas de la mercadotecnia como catálogos impresos y aparadores a la manera de carrusel que permiten apreciar un sin número de modelos de vestidos para el niño dios en diferentes colores.

La epidemia por el covid-19 no solo se hace presente en los atuendos, que con el tema de la salud, más solicitan los clientes, también el editorial del citado catálogo, advierte a sus clientes que a causa del virus, “…en un abrir y cerrar de ojos todo cambio.después de tener libertad nos vimos encerrados y muchos perdimos seres queridos, amigos, compañeros de trabajo. Y esto no acaba el virus sigue presente… Los tiempos se convirtieron en tiempos difíciles y aunque la esperanza sigue latente lo que no hemos perdido es la fe”.

Así este 2022 muchas de éstas figuras serán presentadas en el templo este 2 de febrero como lo marca la tradición católica una de las más arraigadas en nuestro país e interrumpida en 2021 debido a las restricciones sanitarias.