La Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos prepara a los mercados financieros para el incremento de tasas de referencia y para la reducción del tamaño de su balance; sin embargo, la lección de su primera reunión de política monetaria del año no le cayó bien a los activos de riesgo, como son los accionarios y los tipos de cambio, principalmente emergentes como el mexicano.
La conclusión de la reunión de dos días de la Fed fue mantener sus tasas de referencia en 0-0.25 por ciento, pero considera apropiado subirlas “pronto”, que según el consenso del mercado sería en marzo; reducir el ritmo mensual de sus compras netas de activos a 30 mil millones de dólares, que echó a andar para apoyar a la economía estadunidense ante los efectos del covid- 19 y concluirlas en marzo; toda vez que consideró conveniente hablar de la reducción del tamaño de su balance, que arrancará después de que haya comenzado a subir tasas.
Los mercados financieros mostraron antes y después de la conclusión de la primera reunión monetaria del banco central estadunidense una exacerbante volatilidad, en cuya jornada destacó el incremento del rendimiento de los bonos del Tesoro y la fortaleza del dólar a nivel mundial.
En medio de este escenario, el peso registró una depreciación de 0.51 por ciento, equivalente a 10.44 centavos, ante la divisa estadunidense, para cerrar en los 20.7283 pesos por dólar spot, su cierre más alto desde el 22 de diciembre de 2021.
La dureza de la Fed, que preside Jerome Powell, en materia de reducir la liquidez en el sistema financiero estadunidense, cayó mal en los mercados financieros, pero la Fed fue clara y su objetivo es anclar las expectativas de inflación, la cual se encuentra en los niveles más altos en 40 años.
El Índice de Precios y Cotizaciones de la Bolsa Mexicana de Valores (S&P/BMV IPC) retrocedió 0.13 por ciento, a 51 mil 37.05 puntos.
Acoplarse a la Fed
Powell declaró que la Fed tiene “bastante espacio” para subir las tasas y controlar la inflación sin dañar al mercado laboral, comentarios que decepcionaron a los inversionistas de renta variable, que esperaban que el banco central se jugará por un ajuste un poco más moderado este año.
De esta forma, el Dow Jones cayó al cierre 0.38 por ciento, a 34 mil 168.09 puntos, de la mano del S&P 500 que bajó 0.15 por ciento, a 4 mil 349.93 unidades.
Sólo el Nasdaq se salvó con un leve avance de 0.02 por ciento, pese a que el rendimiento del bono del Tesoro a 10 años superó 1.87 por ciento. Las alzas de tasas vuelven más atractiva a la renta fija, en detrimento de los activos de riesgo como las acciones.
Por su parte, el petróleo volvió a desbocarse y el Brent cerró en 89.96 dólares por barril, 1.94 por ciento más caro que el martes, a un paso de los 90 dólares, en medio de una escalada tensión entre Rusia y Ucrania. El petróleo WTI cerró en 86.79 dólares por barril, con un aumento de 1.39 por ciento.
“Aunque prevemos que la inflación en México se modere en el 2022, seguirá arriba del rango de tolerancia. Considerando los diversos riesgos, estimamos que llegue a 6.50 por ciento al cierre de 2022”, describió Alejandro Saldaña, subdirector de análisis de Ve por Más.