Jerusalén. Consciente del riesgo de polémica pero convencido de que su país debe “entender su historia”, el cineasta israelí Alon Schwarz ha causado revuelo con Tantura, documental sobre una presunta masacre de palestinos en 1948.
Proyectado por primera vez la semana pasada en el Festival de Sundance, Tantura aborda la toma del homónimo pueblo pesquero por el ejército de Israel en mayo de 1948, precisamente después de la creación del Estado.
El documental se basa principalmente en el trabajo de un estudiante, Theodore Katz, quien, durante la elaboración de su tesis para un máster de historia en la universidad de Haifa (en Israel) en los años 90, recogió el testimonio de soldados israelíes y residentes palestinos que evocaban la masacre de habitantes desarmados de esta aldea de lo que hoy es el norte de Israel.
La película pone ante la cámara a estos soldados. Algunos niegan firmemente que mataran a civiles durante los combates y hablan de “un mito”. Otros, sin rodeos, confirman que las tropas abatieron a habitantes palestinos cuando la batalla ya había terminado, a veces a quemarropa, en la playa.
Sí pasó: militar
“Sucedió –asegura Yossef Diamant, veterano de la brigada Alexandroni, que combatió en Tantura–. De esto no se habló y yo no había hablado antes, porque podía causar un gran escándalo.”
La tesis de Theodore Katz obtuvo una excelente nota en la universidad, pero se vio inmersa en una polémica nacional cuando sus conclusiones fueron publicadas en un medio israelí en 2000. Veteranos de la brigada Alexandroni lo denunciaron por difamación.
Se vio obligado a pedir disculpas y a afirmar que no hubo masacre en Tantura. “Uno de los mayores errores” de su vida, asegura en la película a propósito de esa rectificación. La cifra de palestinos muertos varía según las estimaciones.
El documental, que entrevista a historiadores, avanza la hipótesis de que existen fosas comunes en la zona basándose en testigos, principalmente palestinos, pero también en el análisis de un experto en topografía.
Al comparar mapas históricos y actuales, asegura que la evolución del nivel del suelo antes y después de los combates sugiere intervención humana para la posible excavación de fosas comunes.
La película concluye que los palestinos masacrados probablemente fueron enterrados en lo que hoy es un estacionamiento cerca de la frecuentada playa Dor.
“Soy sionista, pienso que los judíos deben tener su propio Estado, pero es esencial que entendamos nuestra historia”, explica a la Afp el director Schwarz.
“Que digamos que no había nadie aquí antes que nosotros no ayuda. Es el mito fundacional de la nación, pero pienso que tenemos que madurar”, subraya.
Las reacciones al documental no se han hecho esperar. El gobierno palestino, con sede en Cisjordania, territorio ocupado por Israel, pidió que se cree una “comisión internacional para investigar los crímenes y masacres” que podrían haber cometido las fuerzas israelíes en 1948.
El diario de referencia de la izquierda israelí, Haaretz, reclamó en un editorial la creación de “un grupo de trabajo para investigar el caso de Tantura y excavar y determinar si los restos de una fosa común están efectivamente situados” cerca de la playa Dor.
“Por un lado, tengo miedo a que la tomen contra mí. Por otro, Israel está cambiando”, señala Schwarz, convencido de que la nueva generación está preparada para hablar de los episodios más sombríos ocurridos en 1948.
Además de los miles de muertos en cada lado, más de 760 mil palestinos fueron forzados al exilio tras la creación del Estado de Israel en 1948 y la guerra que siguió. Casi 400 pueblos, Tantura entre ellos, fueron arrasados.