Campeche, Camp., Campesinos del ejido 5 de Febrero, municipio de Champotón, se plantaron ayer por varias horas en el palacio de gobierno para exigir la intervención de la mandataria Layda Sansores San Román a fin de frenar el despojo de 5 mil hectáreas de sus tierras y las agresiones de ejidatarios de Laguna Grande, municipio de Escárcega, a quienes acusan de tala ilegal y de operar más de 200 hornos clandestinos para producir carbón, con la complicidad de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
Efraín Chan Uc, comisario del ejido 5 de Febrero; Guadalupe Barrera Suárez y Mateo Velázquez Jiménez denunciaron que los “laguneros” han devastado un tercio de las 16 mil hectáreas de reserva forestal que les pertenecen desde hace casi una década, y ninguna autoridad ha intervenido.
“Tenemos todos los planos y la carpeta básica de cuando la Presidencia de la República decretó el ejido 5 de Febrero. Hemos presentado demandas y no nos dan respuesta, a pesar de que están las pruebas de que el terreno nos pertenece”, reprocharon.
Señalaron que el gobierno federal les otorga apoyos para la conservación de 8 mil hectáreas de reservas forestales, pero no pueden ingresar por amenazas de los ejidatarios de Laguna Grande.
Mencionaron que por la construcción del Tren Maya las autoridades les ofrecieron construir 15 kilómetros de carretera, pero pidieron a Sansores San Román 15 kilómetros más para poder llegar a sus tierras sin pasar por Laguna Grande, pues aseguraron que los agreden física y verbalmente e incluso los han secuestrado.
Aseveraron que autoridades de la Profepa y Semarnat están involucradas, pues expidieron permisos a los “laguneros”, a sabiendas de que las tierras pertenecen al ejido 5 de Febrero.
“Hay como 200 hornos quemando diario, explotando madera. Queremos diálogo con la gobernadora. Si no hace nada, habrá derramamiento de sangre”, advirtieron.
Amenazaron con detener los trabajos del Tren Maya en el tramo que atraviesa la localidad y acusaron al Fondo Nacional de Fomento al Turismo de intentar despojarlos, pues únicamente les pagó 6 millones de pesos que corresponden a 33 hectáreas, cuando el terreno que abarcó para este proyecto mide 38.
“Mañana (hoy) se cumple la fecha que dio el responsable de Fonatur, Javier Aravena, para resolver. Si no nos dan respuesta para el martes, el miércoles se para el Tren Maya", amagaron.
Tras varias horas de diálogo, la comitiva del ejido Cinco de Febrero salió del palacio de gobierno e informó que autoridades estatales se reunirán con ellos la próxima semana en Champotón.