Una victoria por seis puntos lució como si fuera una paliza en este fin de semana cargado de emociones, pero incluso ese resultado requirió de un tiempo extra.
El triunfo de Kansas City por la friolera de 42-36 sobre Buffalo coronó una ronda divisional en que los otros tres duelos se definieron por goles de campo agónicos que dieron victorias a los visitantes.
Los Jefes y los Bills anotaron tres touchdowns y un gol de campo en los últimos dos minutos del tiempo regular de su encuentro dominical. Luego, Kansas City, monarca vigente de la Conferencia Americana (AFC), se llevó la victoria gracias a una recepción de Travis Kelce en las diagonales, que coronó la primera serie ofensiva de la prórroga.
Ello dejó pactado un duelo entre Bengalíes y Jefes, por la corona de la Americana, el próximo domingo en el Arrowhead Stadium.
Kansas City será anfitrión del partido por el cetro de la conferencia por cuarto año seguido, y buscará disputar su tercer Supertazón consecutivo, mientras Cincinnati no llega al gran partido desde 1989.
Los Carneros se cercioraron de que el encuentro por el título de la Conferencia Nacional se dirima entre dos equipos de la División Oeste. Chocarán con San Francisco tras superar el domingo 30-27 a Tampa Bay, monarca del último Supertazón.
El margen de seis puntos en el triunfo de los Jefes fue el doble de los registrados en los otros tres duelos de la ronda divisional.
Evan McPherson dio a los Bengalíes la victoria por 19-16 ante Tennessee. El novato convirtió un gol de campo de 52 yardas por Cincinnati que la semana pasada logró su primer triunfo en playoffs desde 1991, como local ante Las Vegas.
Los Bengalíes (12-7), monarcas de la División Norte de la AFC, lo-graron después algo mejor en su historia: su primera victoria de visitantes en postemporada.
Cincinnati, que cayó dos veces en el Supertazón ante San Francisco en la década de 1980, consiguió su triunfo más sobresaliente de la temporada regular en la semana 17, cuando superó 34-31 a Kansas City.
Los Carneros ganaron en forma espectacular tras un derrumbe estrepitoso. Dilapidaron una ventaja de 27-3 en la segunda mitad.
Matthew Stafford completó un pase de 44 yardas con Cooper Kupp en el minuto final, antes de que Matt Gay convirtiera un gol de campo de 30 yardas para resolver el encuentro.
Si éste fue el último partido en la ilustre carrera de Tom Brady, el astro se despidió con un desenlace amargo. El quarterback de 44 años, ayudado por los balones que perdieron los Rams, estuvo cerca de repetir la remontada de 25 puntos que consiguió ante Atlanta en la segunda mitad del Supertazón de 2017.
Los Ángeles (14-5) recibirá a San Francisco (12-7), que sorprendió a Green Bay, líder de la Nacional, al derrotarlo el sábado por 13-10 en el Lambeau Field, con un gol de campo de 45 yardas de Robbie Gould, justo cuando el tiempo se agotaba.
Los 49’s buscan disputar su segundo Supertazón en tres campañas. Cayeron ante Kansas City, que se coronó en 2019.
Esta temporada, barrieron a los Rams, incluso en el último partido de la campaña regular, que requirió de tiempo extra. En la semana 10, San Francisco ganó 31-10 de local.
El nuevo duelo reparte el boleto al Supertazón, que se realizará en el estadio de los Carneros, el 13 de febrero.