Saná. Un bombardeo aéreo encabezado por Arabia Saudita contra una prisión operada por los rebeldes hutíes dejó al menos 70 muertos y 138 heridos ayer, informó un ministro de los rebeldes. El ataque fue parte de una ofensiva bélica que horas dejó a la nación más pobre del mundo arábigo sin Internet.
La intensa ofensiva se produjo después de que los hutíes, respaldados por Irán, se atribuyeron un ataque con dron y misil perpetrado dentro de la capital de los Emiratos Árabes Unidos hace unos días. Representó una importante intensificación en el conflicto, una brutal guerra civil en Yemen donde la coalición liderada por los sauditas, apoyada por Washington, ha combatido a los rebeldes desde 2015.
Taha Al Motawakel, ministro de Salud en el gobierno hutí que controla el norte del país, comentó a Ap en esta capital, que 70 detenidos perdieron la vida en la prisión, pero prevé que ese número aumente en las próximas horas dado que muchos de los heridos estaban graves.
Horas antes, un bombardeo a la ciudad menesterosa de Hodeida, confirmado después por fotografías satelitales analizadas por Ap, impactó un centro de comunicaciones digitales de Internet en Yemen. También hubo ataques aéreos cerca de Saná, la capital de Yemen controlada por los rebeldes hutíes, apoyados por Irán, desde finales de 2014.
Basheer Omar, un portavoz del Comité Internacional de la Cruz Roja en Saná, dio la cifra de víctimas a la AP. Declaró que los rescatistas seguían recorriendo el sitio de la prisión en la ciudad norteña de Saada, también controlada por los hutíes.
La Cruz Roja había trasladado a algunos de los heridos a instalaciones en otras partes del país, señaló. Médicos sin Fronteras informó en un comunicado por separado que “alrededor de 200 personas” habían resultado heridas.
“Las primeras víctimas reportadas en Saada son algo terrible”, expuso Gillian Moyes, el director de la oficina de Save the Children en Yemen. “Migrantes buscando una mejor vida y sus familias. Decenas de civiles yemeníes heridos, es una imagen que no esperábamos ver aquí”. La coalición encabezada por Arabia Saudita que combate a los hutíes no se atribuyó de manera inmediata el ataque en Saada.
En cuanto al ataque aéreo en Hodeida, que aparentemente dejó a Yemen sin Internet, NetBlocks comunicó que la interrupción de la conexión a la red de redes comenzó a la una de la madrugada local y afectó a TeleYemen, el monopolio estatal que controla el acceso a Internet en el país. TeleYemen está ahora en manos de los hutíes.
El secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, condenó el bombardeo aéreo y recordó “a todas las partes que los ataques contra civiles e infraestructura privada están prohibidos por el derecho internacional humanitario”. Estados Unidos instó a las partes involucradas a reducir la tensión del conflicto en Yemen.