La jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, afirmó que con la adquisición de la refinería Deer Park en Texas y la modernización de la coquizadora en Tula se logra que el petróleo que se utiliza para el consumo de gasolinas sea producido por Pemex y, con ello, se cumple el compromiso de garantizar la soberanía energética.
La mandataria capitalina enfatizó que las refinerías en México se construyeron, en su momento, para el gran consumo de combustóleo, y desde hace tiempo se habían orientado hacia las gasolinas, pero con todo y las inversiones millonarias no se había logrado.
Dijo que hay tres elementos sustantivos para hablar de un política sustentable en el terreno energético: soberanía, es decir, que los países tengan garantizada la producción suficiente para su consumo; transitar hacia un uso menor de energía, y que ésta garantice el desarrollo social y disminuya las desigualdades.
La mandataria informó que sostuvo una plática con la secretaria de Energía de Estados Unidos, Jennifer Granholm, con quien tocó el tema de la reforma energética.
“Confío en que cualquier malentendido va a aclararse, siempre pensando en la soberanía de cada país y con una visión a largo plazo... tenemos un tratado con Canadá y Estados Unidos y es muy importante que todo se clarifique.”