El grupo de Morena en el Senado se prepara para ratificar el nombramiento presidencial de Pedro Salmerón como embajador de México en Panamá, ya que la gran mayoría de los legisladores considera que la oposición ha emprendido un golpeteo político en su contra, con base en acusaciones no probadas.
La presidenta para la Igualdad de Género, Malú Micher, advirtió que “en tanto no existan denuncias formales o se acompañe a las víctimas a formalizar las acusaciones que se han realizado de forma pública, las autoridades mexicanas y el propio Senado tiene la obligación de apegarse al principio de presunción de inocencia”.
Reconocida luchadora por la causa feminista, expuso en una carta que hizo circular en redes sociales que “ello no implica que no se escuche a las mujeres que hacen las denuncias, sino que para tomar una decisión apegada a derecho, se necesitan resoluciones o documentos legales que nos sirvan a las y los senadores como fundamentos oficiales para actuar en consecuencia”.
Sobre el tema, su compañero de bancada César Cravioto, dijo que la ratificación del historiador Salmerón es un asunto que se ha discutido mucho, a partir de la campaña emprendida por la oposición, especialmente el PAN, y se llegó a la conclusión de que “es puro golpeteo político” y no pueden resolver con base en denuncias anónimas que en ocasiones sólo pretenden desprestigiar a alguna personalidad.
Resaltó que los panistas han guardado silencio en torno a las denuncias que Morena ha presentado contra legisladores del blanquiazul acusados públicamente de violación y violencia contra la mujer. Se refirió al caso del diputado federal electo por Guanajuato, Jorge Romero, quien sigue su proceso en libertad, ya que el Poder Judicial de la entidad lo dejó en libertad, al cambiar la acusación de violación de dos jóvenes, a abuso sexual. “Igualmente, callaron cuando se hizo pública la agresión verbal de otro diputado panista a la senadora Bertha Caraveo”.
El senador Cravioto insistió en que están las denuncias e incluso “llevamos a las víctimas de violación a que expusieran sus casos en el Senado y así debieran ser en las acusaciones en contra de Salmerón. Estoy consciente de que a veces quien padece el agravio no quiera hablar, pero no se puede aceptar que con anónimos se manche la trayectoria de alguien”.