Nueva York., El lema de la novena Cumbre de las Américas, la cual se realizará en Los Ángeles entre el 6 y 10 de junio, es “Construyendo un futuro sustentable, resistente y equitativo” con el cual el gobierno anfitrión de Joe Biden promoverá el combate a la pandemia, una recuperación “verde”, el manejo “integral” del fenómeno migratorio y el consenso hemisférico sobre la democracia, informaron altos funcionarios en Washington.
Esta será la novena cumbre, y la primera desde la inaugural en Miami, en 1994, en realizarse en Estados Unidos. A la anterior, en 2018, en Chile, no asistió el entonces presidente estadunidense Donald Trump.
Aún no está la lista de invitados, pero altos funcionarios indicaron hoy en respuesta a si Cuba, Venezuela y Nicaragua estarían presentes, que sólo serán bienvenidos aquellos gobiernos que “respetan” los principios democráticos, y que la lista final será elaborada en consulta con la Organización de Estados Americanos.
Con un asombroso vocabulario que incluye “principios democráticos”, transparencia, corrupción, inclusividad, equidad, sustentabilidad, “verde” y esfuerzos “integrales” y “regionales” sobre el manejo “humanitario” de la migración, del cambio climático, los derechos humanos, el respeto a grupos marginales, indígenas y mujeres, entre otros temas y conceptos, un par de altos funcionarios del gobierno de Biden intentaron establecer el marco de la agenda para la próxima cumbre.
Indicaron que no sólo sería un proceso entre mandatarios, sino también se convocará a la sociedad civil y al sector privado a participar.
Recordaron que Biden siempre ha otorgado prioridad a las relaciones con el hemisferio desde sus tiempos como senador y después como vicepresidente y que su gobierno se ha dedicado a superar los daños causados a las relaciones con la región durante la presidencia de Trump.
Resaltaron la reanudación de iniciativas regionales y bilaterales tanto dentro de América del Norte (el Diálogo Económico y el Diálogo de Seguridad con México y la Cumbre de Líderes de América del Norte, como ejemplos) como con Centro y Sudámerica sobre varios temas, desde seguridad a migración, gobernanza democrática y más.
Un alto funcionario del gobierno de EU enfatizó los esfuerzos para lograr resoluciones negociadas de crisis como la de Haití y Venezuela y en torno a Cuba, donde el presidente estadunidense, dijo, ha tomado una postura de “duro con el régimen, suave con el pueblo”.
No hicieron referencia al consenso entre los países del hemisferio en oposición al bloqueo estadunidense contra Cuba, expresado cada año en la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas.
En respuesta a la toma de posesión de Xiomara Castro en Honduras, el funcionario indicó que “hemos ayudado a que sea exitosa”, aunque no mencionó el apoyo de Washington al golpe de Estado que derrocó al gobierno del esposo de la ahora presidenta electa en 2009.