La prohibición de que menores de 18 años trabajen en el campo ha conllevado su participación en actividades ilícitas, por lo que productores y legisladores buscan modificar la ley para que puedan laborar en el sector agropecuario en operaciones no riesgosas, lo cual está permitido en Estados Unidos y Canadá.
Así lo mencionaron en el foro virtual Oportunidades laborales para jóvenes en el sector agropecuario, convocado por el Consejo Nacional Agropecuario, donde el dirigente de la asociación empresarial, Juan Cortina, sostuvo que el organismo está a favor de que se legisle con el fin de integrarlos al sector en trabajos que no impliquen peligros. “Muchos son padres de familia que requieren un sustento, muchos buscan en actividades ilícitas fuentes de ingreso. Se debe reconocer esta realidad”, estableció.
Mariana Menéndez de Save of the children afirmó que en el país hay alrededor de 638 mil jóvenes que trabajan en el sector agropecuario, “la falta de acceso a servicios educativos, así como la falta de empleo, los obliga a migrar o dedicarse a actividades ilegales o informales para apoyar al sustento familiar”.
Consideró que en el agro se debe garantizar que lleven a cabo tareas no peligrosas, insalubres o que les ocasionen efectos negativos. Además, dijo que “la prohibición para que adolescentes trabajen en actividades agrícolas muestra otra realidad: son víctimas de violaciones a sus derechos”. Agregó que se exponen a la informalidad, horarios y jornadas mayores a las permitidas por ley, sin equipo para proteger su salud, sufren intoxicación, insolación, explotación y tráfico, así como abuso de contratistas.
Existe el trabajo infantil en el campo y la escasez de mano de obra ocasiona la pérdida de productos por falta de trabajadores para la cosecha, sostuvo Gabriel Trujillo, líder del sindicato Primero de mayo. Señaló que los padres buscan trabajo para sus hijos en el campo, que no consiguen porque la ley lo prohíbe al considerarlo como una actividad de riesgo.