El gobierno federal dejó de percibir 104 mil 76 millones de pesos durante el año pasado debido al subsidio en el precio de las gasolinas, 2 mil 758 por ciento más que en 2020, dio a conocer el Servicio de Administración Tributaria (SAT). El recurso, cuyo fin es evitar que los combustibles fósiles sean más costosos para el consumidor final en un entorno de alza en los precios internacionales del petróleo, equivale a cinco veces lo destinado, también en 2021, a uno de los programas insignia de la actual administración: Jóvenes Construyendo el Futuro.

El organismo detalló que el año pasado los estímulos a gasolina y diésel fueron superiores en 100 mil 630 millones de pesos a los 3 mil 446 millones que representaron en 2020, cuando –con el inicio de la pandemia, los cierres de la economía y las restricciones a la movilidad– los precios del crudo llegaron a cotizar por debajo de cero.

El SAT agregó que, si bien se disparó el monto del estímulo, el volumen de importaciones de gasolinas y diésel durante el año pasado fue 24 por ciento menor que en 2018, 20 por ciento menor que en 2019 y 2 por ciento menor a 2020. Reducción que el organismo atribuye “principalmente al contrabando técnico y bronco de combustibles”.

Al actualizar las cifras de cierre de año, el SAT señaló que superó la meta establecida en la Ley de Ingresos de la Federación (LIF) 2021, de tal manera que los ingresos tributarios sumaron 3 billones 566 mil 622 millones de pesos, “un crecimiento anual real de 1.1 por ciento, a pesar de la pandemia y de que la reactivación económica apenas está iniciando”, enfatizó el organismo.

Sin embargo, el alza se debió en mayor medida a los impuestos que se cobran al comercio exterior, los cuáles aumentaron 9.2 por ciento respecto de 2020, mientras las contribuciones internas –las que reflejan el consumo en el país, la adquisición de servicios y el empleo– cayeron 1.8 por ciento, una baja que el organismo atribuyó al incremento en devoluciones.

El año pasado las contribuciones internas alcanzaron 2 billones 567 mil 471 millones de pesos, es decir, 72 por ciento de los ingresos tributarios totales, pero fueron menores a las registradas en 2020 debido a que las devoluciones incluyen al comercio exterior.

El organismo detalló que la recaudación de impuesto sobre la renta aumentó 1.7 por ciento respecto de 2020, la del impuesto especial sobre producción y servicios se redujo 18 por ciento –en parte por los estímulos a combustibles–, mientras el impuesto al valor agregado (IVA) aumentó 7.7 por ciento.

Sin embargo, mientras la recaudación por IVA aumentó 22.2 por ciento derivado de las operaciones de comercio exterior, se redujo 14.3 por ciento en las contribuciones internas, merma que incluye los 646 mil 913 millones de pesos que el SAT reportó como devoluciones a los contribuyentes.

Aumenta contrabando

El SAT prevé que hay un incremento general del contrabando. En su reporte sobre ingresos del gobierno federal al cierre de 2021 explica que la recaudación de comercio exterior mejoró por la recuperación económica, pasó de 945 millones de pesos a mil 31 millones; sin embargo, fue 6.6 por ciento menor a la de 2018 y también se quedó 5.7 por ciento debajo de lo registrado en 2019.

“La tendencia observada en los ingresos de comercio exterior en 2021, comparada con los datos del Inegi sobre operaciones de comercio exterior y el comportamiento de la recaudación de impuestos internos muestra un incremento del contrabando”, asentó el organismo.

Detalló que entre las medidas que se aplicarán este año para reducir esta actividad se encuentran el complemento Carta Porte en la facturación, para tener mayor control de las mercancías que se trasladan a nivel nacional, su origen y legal estancia; así como la creación de la Agencia Nacional de Aduanas de México para fortalecer la seguridad en el despacho aduanero.