Washington. Este año, el Festival de Cine Sundance vuelve a estar en línea y está armado con nueve días de documentales de alto perfil, desde Kanye West y la princesa Diana hasta Lucille Ball y Bill Cosby, primeras películas animadas de conocidos y desconocidos, reuniones virtuales, así como preguntas y respuestas de cineastas. El certamen había planeado volver a las montañas este año, pero dos semanas antes de que miles de personas se reunieran en Park City, Utah, los organizadores decidieron dar un giro en lugar de cancelarlo o posponerlo.
La experiencia de 2021 enseñó a los programadores que no sólo podían organizar un festival exitoso en línea, sino que las películas aún podían triunfar incluso cuando los cineastas, el público, los compradores, los vendedores y la prensa no estaban todos en el mismo lugar físico.
En su edición 44, la programación es tan sólida como siempre. Las selecciones de la noche de apertura incluyen Emergency, una mirada oscuramente cómica sobre temas como la raza y el asalto, así como el documental de Eva Longoria La guerra civil, sobre la pelea de 1996 entre Óscar de la Hoya y Julio César Chávez y los temas de identidad que planteó para muchos mexico-estadunidenses.
“Esa pelea realmente dividió a la comunidad mexicana en Estados Unidos, partió los hogares”, explicó Longoria.
Para algunos es una oportunidad de obtener rumores antes del lanzamiento. La docuserie de Kanye West jeen-yuhs: A Kanye Trilogy debutará en el festival antes de que la parte uno llegue a Netflix el 16 de febrero. El festival también albergará el estreno de We Need to Talk About Cosby de W. Kamau Bell, que se emitirá más tarde en Showtime, y la primera parte de Phoenix Rising, sobre el viaje de Evan Rachel Wood para nombrar a su presunto abusador, Marilyn Manson, antes de su lanzamiento en HBO.
Algunos ya causaron sensación en otros festivales, como Happening, de Audrey Diwan, un drama francés sobre una estudiante universitaria que busca abortar en la década de los 60, ganador del León de Oro en el Festival de Cine de Venecia.
Pero la mayoría de los demás buscan atención y distribución. Sundance siempre se ha enorgullecido de ser una actividad de descubrimiento y ha ayudado a impulsar muchas carreras cinematográficas, desde la de Steven Sodebergh hasta la de Ryan Coogler.
892, de la cineasta debutante Abi Damaris Corbin, se basa en la historia de un ex marine que asalta un banco. Es uno de los títulos de adquisición de mayor perfil con John Boyega a la cabeza, con el apoyo del difunto Michael K. Williams. Boyega contó que estaba llorando al leer el guion. “Simplemente pensé que esta historia necesita ser contada”, explicó Boyega.
En otro título candente, Watcher, Maika Monroe interpreta a una estadunidense que acaba de mudarse a Rumania y comienza a sospechar que la acosan.
El thriller atmosférico de la directora Chloe Okuno captura una experiencia familiar para las mujeres y cuenta películas como Lost in Translation y Perfect Blue como influencias estilísticas.
“Sundance para muchos cineastas independientes es el sueño”, señaló Okuno.“Es para lo que estás trabajando”.