Sydney. Tonga estaba prácticamente aislada del mundo tras la erupción el fin de semana de un volcán submarino que paralizó las comunicaciones de este país insular del Pacífico.
Los expertos advirtieron que la conexión a Internet podría estar cortada varias semanas para las cerca de 100 mil personas que viven en el país debido a la rotura en un cable submarino.
La erupción hace dos días del volcán Hunga Tonga-Hunga Haa’pai cubrió la isla de cenizas, provocando un tsunami en todo el Pacífico que causó dos muertes en Perú y una víctima británica en Tonga.
La isla del volcán Hunga Tonga-Hunga Ha’apai, el área de tierra, ubicada unos 45 kilómetros al noroeste de la capital de Tonga, Nuku’alofa, y con una longitud de 500 metros emergida en medio de Polinesia, creada por una erupción en diciembre de 2005, desapareció prácticamente tras la explosión, según imágenes de satélite de unas 12 horas después.
Los países vecinos y las agencias internacionales siguen evaluando la magnitud de los daños.
La erupción se sintió en lugares tan lejanos como Alaska, provocando un oleaje que alcanzó las costas del Pacífico, desde Japón hasta Estados Unidos.
Se sabe que la explosión volcánica del sábado dejó la capital, Nuku’alofa, cubierta de ceniza, y cortó un cable de comunicaciones submarino, cuyo restablecimiento podría llevar dos semanas.
“Sabemos que el agua es una necesidad inmediata”, aseveró la premier de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern a la prensa, y explicó que su país depende de los teléfonos por satélite para comunicarse con Tonga.
Nueva Zelanda y Australia enviaron ayer aviones de reconocimiento para evaluar los daños y pusieron a disposición aviones de transporte militar C-130 para lanzar suministros o aterrizar si las pistas se consideran operativas.
Los vuelos de reconocimiento ayudarán a informar al gobierno de Tonga sobre la magnitud de los daños causados por el volcán y el tsunami, y a identificar las necesidades de ayuda, añadió Ardern.
El ministro de Defensa de Nueva Zelanda explicó que el país insular había logrado restablecer la electricidad en “grandes partes” de la ciudad.
Con las comunicaciones paralizadas, los tonganos fuera del país intentan, desesperados, hablar con sus seres queridos.
Southern Cross está ayudando a Tonga Cable Limited, propietaria del cable de 872 kilómetros que une el país insular con Fiyi, y desde allí con el resto del mundo.
Una vez restablecido el suministro eléctrico, las pruebas indicaron que la avería en las comunicaciones se trataba de una rotura en un cable submarino.
Las autoridades confirmaron la muerte de una británica de 50 años, Angela Glover, quien intentaba salvar a sus perros del gran oleaje provocado por la erupción cuando se soltó del árbol al que estaba agarrada y fue arrastrada por el agua, informó la cadena británica Sky News.
El jefe adjunto de la misión de Tonga en Australia, Curtis Tu’ihalangingie, comentó que a su país le preocupa el riesgo de que las entregas de ayuda propaguen el covid-19 en la isla, que está libre de la enfermedad, por lo que cualquier ayuda que se envíe tendrá que ser puesta en cuarentena.
En tanto, la refinería La Pampilla achacó a una serie de “mareas inusitadas”, provocadas tras la erupción del volcán, como principal motivo del derrame de petróleo registrado la tarde del sábado 15 en playas de la provincia de Callao, en el oeste de Perú.