Ciudad de México. Las ventas comparables de la Asociación Nacional de Tiendas Departamentales y de Autoservicio (Antad) crecieron 13 por ciento de manera nominal, es decir, sin descontar la inflación, en 2021 respecto al año previo.
De acuerdo con el informe del organismo, sus ventas totales ascendieron a un billón 327 mil millones de pesos, cifra apenas 2 por ciento superior en comparación con el billón 301 mil millones de pesos reportados en todo 2020.
Cabe apuntar que en 2020 las ventas comparables de la Antad registraron una contracción de 5.1 por ciento como resultado de las restricciones de movilidad en la primera mitad del año como consecuencia de la pandemia de covid-19.
De esta forma, las ventas totales de la Antad de 2021 continúan por debajo de los niveles previos a la emergencia sanitaria, pues en 2019 registraron un monto de un billón 403 mil millones de pesos.
En conferencia de prensa virtual, Vicente Yáñez, presidente de la Antad, resaltó que los factores que han influido para que las ventas no se recuperen por completo son el panorama incierto en la economía por la pandemia, problemas de inventario debido a las demoras en las cadenas de suministro e incremento del comercio informal.
Además de otros como la incertidumbre por estrategias gubernamentales, problemas de inseguridad pública y alza de costos de materias primas.
Para el próximo año la Antad espera tener un crecimiento de 4.3 por ciento en sus ventas comparables, es decir, inferior al reportado en 2021.
Reforma eléctrica pone en riesgo inversión
Yáñez resaltó que para este 2022 las diferentes tiendas de autoservicio y departamentales que conforman la Antad tienen presupuestado invertir en el país alrededor de mil 700 millones de dólares, cifra superior a los mil 400 millones que desembolsaron en 2021.
No obstante, el representante del sector advirtió que la reforma eléctrica propuesta por el gobierno y que actualmente está en discusión representa un riesgo para dicha inversión, pues impactaría directamente en los costos de las cadenas.
Explicó que el gasto en electricidad es el tercero más importante para las tiendas departamentales y de autoservicio, sólo por debajo de los costos de los productos y de los salarios de los trabajadores.