Roma. La subasta de la residencia romana de los príncipes Ludovisi Boncompagni, con un excepcional mural de Caravaggio, fue declarada desierta, reveló ayer el notario encargado.
“Nadie participó en la subasta”, aseguró Camilo Verde, quien precisó que se realizará el 7 de abril y partirá de un valor reducido en cerca de 20 por ciento.
El monumental Casino de la Aurora, más conocido como VillaLudovisi, es un imponente palacio de 2 mil 800 metros cuadrados, repartido en seis plantas con un suntuoso jardín, ubicado en uno de los sectores más elegantes del corazón de Roma.
Es la residencia campestre de una de las familias aristocráticas más ricas y poderosas de Italia y conserva, además del Caravaggio, frescos de Guercino (1591-1666), reconocido pintor barroco de Bolonia, así como anti-guas estatuas.
Se estimaba que el Casino de la Aurora, verdadera joya del barroco romano, tenía un valor de 471 millones de euros (537 millones de dólares), pero esa estimación bajó a 376 millones de euros para la próxima subasta.
Si la residencia se vende a un precio cercano al fijado como inicio por la subasta sería una de las ventas de bienes raíces registradas públicamente más caras de la historia.
La venta fue decidida por un tribunal de Roma para poner fin a las disputas entre los herederos del príncipe Niccolo Ludovisi Boncompagni, quien falleció en 2018 a los 77 años.
El enfrentamiento familiar entre la tercera esposa del príncipe, Rita Jenrette Boncompagni Ludovisi, una pintora estadunidense de 72 años que posó para Playboy, y los hijos nacidos del primer matrimonio, obligó a los jueces a subastar la villa debido a que ninguno ha podido hacer frente a la hipoteca por los altos gastos de mantenimiento.
Una petición para que el Estado intervenga, lanzada en la página change.org, ha recaudado más de 35 mil firmas.
Los signatarios solicitan que Italia ejerza su derecho de compra y convierta el lugar en un museo y centro cultural.
Según la ley italiana, el gobierno puede ejercer su derecho sólo después de que haya sido efectivamente adquirida por un particular, dentro de un plazo de 60 días de la conclusión de la venta y ofreciendo el mismo precio de compra.