El Laboratorio Nacional de Soluciones Biomiméticas para Terapia y Diagnóstico de la Facultad de Ciencias de la UNAM, desarrolló un sensor para detectar el covid-19, mucho más rápido y menos costoso que las pruebas PCR realizadas en unidades privadas, por las que llegan a cobrar más de 3 mil pesos.
Este método, “que ha arrojado bastantes buenos resultados”, está en espera de ser validado por el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (Indre), que en un informe previo indicó que, comparado con sus tests de PCR, tiene 100 por ciento de sensibilidad y 98 por ciento de especificidad, afirmó Tatiana Fiordelisio Coll, responsable del laboratorio.
“El tiempo de resultado (de la prueba) es aproximadamente 40 minutos y el costo que hemos calculado es como de 200 pesos, pero evidentemente es un costo (del) que no tengo precio de mayoreo para comprar insumos, por lo que podría bajar más”, dijo en entrevista.
Mientras obtienen la validación del Indre, en la Facultad de Ciencias el centro de investigación –que cuenta con certificación ISO9001– realiza pruebas PCR para la comunidad universitaria y público en general. En un año y medio han tomado más de 18 mil 600 muestras. Fiordelisio Coll informó que el precio de los tests es de 500 pesos para los universitarios y de 700 para el resto de las personas.
“Creemos que toda la gente debe tener derecho” a diagnosticarse con PCR, pero “los precios que existen en el mercado son, por decir lo menos, un robo a mano armada”, aseveró.
En diversos laboratorios privados, como El Chopo y Olarte y Akle, las pruebas de este tipo tienen un precio que va de mil a 3 mil 700 pesos, en este último caso se incluye test para influenza, según se pudo constatar en un seguimiento realizado por este diario.
Debería haber una regulación, “porque realmente lo que nosotros estamos cobrando (por la PCR) es el costo de la prueba, los insumos”, destacó Fiordelisio Coll.
Detalló que en el laboratorio de la Facultad de Ciencias los resultados se entregan el mismo día y dan información adicional sobre los valores, “que son muy importantes para que alguien entienda si tiene una alta carga viral o una baja”. Para acceder a este servicio es necesario pedir una cita al correo biosensor@ciencias.unam.mx.
La académica puntualizó que con autorización previa, a los usuarios también se les realiza la prueba para el biosensor, ya que los resultados les sirven para seguir recabando evidencia sobre su funcionamiento. Explicó que, comparado con la PCR, el desarrollado por el Laboratorio Nacional de Soluciones Biomiméticas no requiere amplificación, “directo de la muestra, nosotros hacemos lo que se llama una hibridación”, para detectar material genético. “Es más barata porque no necesita equipos de alto costo, ni muchísimos materiales, y es de fácil uso”.
Sobre la solicitud para que el Indre califique el biosensor, expuso que desde septiembre del año pasado se presentó, pero el proceso se estancó porque no se ha evaluado la parte técnica. “Nos dijeron que no tienen el equipo” para hacerlo.
Refirió que antes de la pandemia el proyecto de biosensores se utilizaba en diversas investigaciones, entre ellas, algunas relacionadas con detectar insulina y glucosa en muestras de saliva.